Las cicatrices siempre se quedan para recordarte como saliste adelante.
Javier Castillo
En el exterior es energía pura y una sustancia incolora. Todo lo demás ocurre a través del mecanismo de nuestros sentidos. Nuestros ojos ven sólo una pequeña fracción de la luz del mundo. Se trata de un truco para hacer un mundo de color, que no existe fuera de los seres humanos.
Albert Hofmann
No habrá desarrollo sin educación, ni progreso sin cultura.
Alberto Assa
Enseña el Cristo: a tu prójimo amarás como a ti mismo, pero no olvides nunca que es otro.
Antonio Machado
Si el senador Kennedy resulta elegido presidente de los EE.UU., el gobierno de Chile tomará las medidas necesarias.
Augusto Pinochet
Es necesaria la experiencia para añadir la creencia emocional a la comprensión intelectual. Sin embargo, el impacto de la experiencia siempre se desvanece en algún grado.
Brian Weiss
La amistad, como el diluvio universal, es un fenómeno del que todo el mundo habla, pero que nadie ha visto con sus ojos.
Enrique Jardiel Poncela
Qué suerte hemos tenido quitándole un consejero al hijoputa, dándoselo a IU.
Esperanza Aguirre
A la gente las ideas le parecen aburridas porque no distinguen entre las ideas vivas y las que están amontonadas en un estante.
Ezra Pound
¡Como un perfume que arrebata el viento, pasaron para mí las horas bellas!
Francisco Villaespesa
¡Felicidad! ¡Felicidad! Dulzura del labio y paz del alma... Te he buscado sin tregua, eternamente, en la hermosura, en el amor y el arte.
La mayoría de los hombres llevan una vida de absoluta desesperación. Lo que se llama resignación es la desesperación confirmada.
Henry David Thoreau
Es maravilloso estar aquí en el gran Estado de Chicago. Porque es tonta: Chicago es una ciudad perteneciente al Estado de Illinois.
Jennifer Lopez
Existe una evidencia muy grande de que cuanto mayor sea nuestra autoestima mejor vamos a poder tratar a los demás.
Nathaniel Branden
Experiencia es el nombre que todos dan a sus propios errores.
Oscar Wilde
No hay quien sea enteramente inaccesible a la adulación, porque el hombre mismo que manifestase aborrecerla, en alabándole de esto, es adulado con placer suyo.
William Shakespeare