El Quijote no es solo uno de los libros más leídos del mundo, sino uno de los menos leídos si contamos la gente que no lo ha leído.
Jaume Perich
Observe como, en política, el término extremismo se ha convertido en un sinónimo de malvado, independientemente del contenido del asunto (lo malvado no es aquello sobre lo que se sea extremo, sino el mero ser extremo, esto es, consistente).
Ayn Rand
No hizo nada igual con ninguna otra nación. Si yo estuviera en aquellos países, iría a visitar este Santuario, no sólo con los pies descalzos, sino andando el camino de rodillas.
Benedicto XIV
Si éste fuera un mundo perfecto no escribiríamos novelas ni haríamos películas. Lo viviríamos, a través del amor de los demás.
Carlos Fuentes
El favoritismo nos grava más pesadamente que muchos millones de deuda.
Edmund Burke
Es genial pensar que el film pueda ayudar a transformar la realidad.
Fernando Meirelles
Cien profundas soledades forman juntas la ciudad de Venecia -ésa es su magia. Una imagen para los hombres del futuro.
Friedrich Nietzsche
El matrimonio, como la vida entera, es algo terriblemente difícil que hay que volver a empezar desde el principio todos los días, y todos los días de nuestra vida. El esfuerzo es constante, e inclusive agotador muchas veces, pero vale la pena. Un personaje de alguna novela mía lo dice de un modo más crudo: También el amor se aprende.
Gabriel García Márquez
El toreo es el único arte que juega con la muerte.
Henry de Montherlant
Aún no ha nacido la persona que pueda amarme como yo amo.
Jean-Jacques Rousseau
La persona infiel juzga que quien es indigno de confianza es su pareja.
John Gottman
No quiero ser conocida como chica a la que dispararon los talibanes, sino chica que lucha por la educación, quiero dedicar mi vida a esta causa.
Malala Yousafzai
Hablo en serio, no estoy de broma, yo lo que quiero es jugar siempre.
Neymar
La Navidad agita una varita mágica sobre el mundo, y por eso, todo es más suave y más hermoso.
Norman Vincent Peale
La mejor manera de deshacerse de los olores de cocina: comer fuera.
Phyllis Diller
Yo me pasaba semanas enteras tocando en los carnavales, por la satisfacción de hacerlo, no porque me iban a pagar. Ver que la gente se alegraba y se divertía era para mí una gran satisfacción. Iba a tocar la quena y cantaba los villancicos con los chicos que, como yo, adoraban al niñito Dios.
Tomás Lipán