Aunque no existiera el divorcio, el matrimonio siempre acabará mal: uno de los cónyuges morirá. Incluso, más tarde también morirá el otro.
Jaume Perich
Creo que perdemos la inmortalidad porque la resistencia a la muerte no ha evolucionado; sus perfeccionamientos insisten en la primera idea, rudimentaria: retener vivo todo el cuerpo. Sólo habría que buscar la conservación de lo que interesa a la conciencia.
Adolfo Bioy Casares
Dios... Un ser cuya única definición es que está más allá de de la capacidad de la mente humana para ser comprendido.
Ayn Rand
Siempre la mala paz es mejor que la mejor guerra.
Cicerón
En nuestra organización social actual, la aprobación del público resulta crucial para cualquier proyecto de gran calado. De ahí que un movimiento digno de todos los elogios puede fracasar si no logra imprimir su imagen en la mente pública.
Edward Bernays
La envidia va tan flaca y amarilla porque muerde y no come.
Francisco de Quevedo
Temblad ante el esclavo cuando rompe sus cadenas, no tembléis ante el hombre libre.
Jean-Paul Sartre
No riegues con lágrimas mi sepulcro, que las lágrimas son agua, y el agua no es de mi gusto.
Juan de Iriarte
A quienes no les gusta o les parece cruel una buena corrida o una buena pelea de gallos, la solución es muy sencilla: no vayan. Pero, qué tal la Feria de Cali sin toros o el Festival Vallenato sin gallos? ¡Y, por Dios!, no sigamos legislando como si viviéramos en Dinamarca.
Juan Manuel Santos
Los gorriones juegan a la escondida entre las plantas de té.
Kobayashi Issa
A la luz de la luna había flores y solo era un campo de algodón.
Matsuo Basho
Siempre tendremos con fuerza a lo prohibido, y deseamos lo que se nos niega.
Ovidio
Quien afirma que la mujer solamente sabe llorar nunca entenderá una cascada.
Silvia Schmidt
El arte consiste en remodelar la vida pero no crear la vida, ni causar la vida.
Stanley Kubrick
Un ahorrador es un imbécil que inmoviliza mil francos para ganar cinco, e ignora cuántas cosas bellas se pueden hacer con mil francos.
Tristan Bernard
Sin embargo, todos estos incidentes exteriores carecían por completo de importancia en comparación con el único hecho significativo: estábamos encerrados.
Wladyslaw Szpilman