Todo impulso del sentimiento debe estar dirigido por la razón, y a mi juicio, el esfuerzo debe ser proporcional a lo que se pretende.
Jane Austen
Quizás eso es lo que queremos decir cuando hablamos de inmortalidad literaria: una vida que no acaba nunca de ser contada.
Alberto Manguel
No siempre lo posterior a un momento determinado significa progreso.
Alessandro Manzoni
Un pueblo educado es un pueblo armado, convirtiéndose en el enemigo más peligroso para el gobierno, sistema, por ello es que cada vez reducen el presupuesto de la educación.
Alex Pimentel
Tanto el que te envenena como el que te descalifica tratará por todos los medios de que no alcances tus sueños, y se encargará de boicotear cada uno de tus proyectos. Su lema es: Si yo no puedo, él tampoco.
Bernardo Stamateas
La curva más linda en una mujer es su sonrisa.
Bob Marley
La decisión ya la has tomado, ahora sólo estás intentando entender por qué la has tomado.
Gloria Foster
En el lenguaje científico la claridad es la única estética permitida.
Gregorio Marañón
Mis amigos pedían para navidad aviones o carritos, y yo solo pedía un hogar para vivir.
Justin Bieber
Si queremos salvar nuestro país debemos liberar nuestra ira en una sola noche.
Marisa Tomei
Los errores más pequeños son siempre los mejores.
Molière
Es un infame el que quiere ver a sus enemigos arrodillados en desfortuna.
Nicolae Iorga
Una idea original se puede producir en cualquier ambiente, conserve o no la herencia de lo pasado, pero sólo será dominadora si encuentra ya el camino abierto para ella por una sucesión de ideas que le sirvan de antecedente.
Ramiro de Maeztu
Éramos el abrazo de amor en que se unían el cielo con la tierra.
Rosario Castellanos
El dominio del espacio por el hombre es la mayor aventura y la más inspiradora empresa.
Wernher von Braun
Con la moral completamente baja por el calor, por no tener nada que hacer y porque J. R. está en actitud polémica, egoísta e irritable, me encuentro planeando el resto de mi vida egoístamente. Voy a tratar de disfrutar parte de lo que me queda de ella. Y de seguro quiero un cuarto para mí sola para hacer lo que me dé la gana, abrir bien las ventanas, ponerme crema en las manos cuando el fregar me endurece la piel y moverme en la cama si me apetece.
Zenobia Camprubí Aymar