No mueres cuando te enamoras.
James McAvoy
Lealtad es cosa que dirige a los hombres en todos sus hechos, para que hagan siempre lo mejor.
Alfonso X el Sabio
No hay genio sin un gramo de locura.
Aristóteles
Pues le pertenecía como una petaca, un mueble o una prenda de ropa, sin que nadie se la pudiera disputar; ¡Y ella parecía tan resignada a ser petaca, y siempre petaca!
Benito Pérez Galdós
Dando nuestra comida, nos hacemos más fuertes, ofreciendo a los demás nuestros vestidos, nos hacemos más bellos, prestando desinteresadamente las moradas de la pureza y la verdad, conseguimos grandes tesoros.
Buda Gautama
Cualquiera sirve para rey; casi nadie para solitario.
Clarín
Debo ser la reencarnación de algún gran arquitecto egipcio porque me encanta ver, tengo pasión por ver las cosas.
Cristina Fernández De Kirchner
Un hombre que consigue adueñarse absolutamente de su mente puede adueñarse de cualquier otra cosa para la que esté legalmente autorizado. Soy muy peculiar, muy tenaz. Me gusta el control... de mí mismo y de los que me rodean.
E. L. James
Creo muchísimo en el poder de la información así que he decidido pasar la vida dedicándome a decir lo importante que es el acceso a la información y asegurarnos que tengamos libertad de expresión y que todo el mundo pueda acceder a ella.
Eric Schmidt
La civilización ha convertito la soledad en uno de los bienes más delicados que el alma humana puede desear.
Gregorio Marañón
El deber es ser útil, no como se desee, sino como se pueda.
Henri-Frédéric Amiel
Podía lidiar con el odio. El odio es activo. Tu odias algo o a alguien. Con lo que no podía era con la frustración. La frustración se sufre.
Juan Gómez-Jurado
Si el arte necesita una explicación, ¿Dónde está lo visual?
Leonora Carrington
Podemos decir que la mano ha seguido a la inteligencia, a la espiritualidad y al sentimiento y que la huella de su trabajo ha transmitido las pruebas de la presencia del hombre.
Maria Montessori
La biblioteca es el laboratorio del matemático.
Paul Halmos
Si hay algo en nosotros verdaderamente divino, es la voluntad. Por ella afirmamos la personalidad, templamos el carácter, desafiamos la adversidad, reconstruimos el cerebro y nos superamos diariamente.
Santiago Ramón y Cajal