Frase de Jacques Prévert

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Una naranja sobre la mesa, su vestido en la alfombra, y usted en mi cama, dulce regalo del presente, emoción en la noche, llama de m... - Jacques Prévert

Una naranja sobre la mesa, su vestido en la alfombra, y usted en mi cama, dulce regalo del presente, emoción en la noche, llama de mi vida.

Jacques Prévert

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La finalidad de Hitler era en primer lugar mover a las masas y, luego, una vez apartadas las masas de sus fidelidades y su moral tradicionales, imponerles -con el hipnotizado consentimiento de la mayoría- un nuevo orden autoritario de propia creación personal.

Aldous Huxley

Una vida entera de méritos no basta a encubrir una violencia.

Alessandro Manzoni

Me identifico con el caracol porque yo mismo, cuando me abstengo sexualmente es cuando soy más yo mismo, soy uno y otro.

Andy Warhol

Mi amiga, mi dulce amiga, aquella que me amaba, me dice que ha dejado de quererme. No recuerdo un invierno tan frío como éste.

Ángel González

Tenemos que vivir, por muchos que sean los cielos que hayan caído sobre nosotros.

D. H. Lawrence

Ser original es, en cierto sentido, juzgar el valor de la mediocridad de los demás, lo que me parece de un gusto dudoso.

Ernesto Sabato

La vieja Iglesia es la única capaz de volver a sobrecoger a la humanidad con las paradojas cristianas.

Gilbert Keith Chesterton

Yo no soy un esquimal, soy un vikingo.

Jón Páll Sigmarsson

Sigue como tus padres alentado de la virtud la senda, y nada temas; que en cualquier estado vive el hombre de bien serenamente a una y otra fortuna preparado, y libre, o en cadena, y aun ya alzada sobre su cuello la funesta espada,. en noble impavidez antes al frente a la señuda adversidad humilla, que a un risueño tirano la rodilla.

José Joaquín de Olmedo

Hago ciudades, casas, barracas, etc. De todo, hasta cositas y la suma de las cositas modestas, permite hacer algo al final.

Le Corbusier

Deseo que todos sepan el bien para alegrarse, y el mal para remediarlo, si aman a su patria; así que nada oculto ni ocultaré jamás.

Manuel Belgrano

Los hombres olvidan con mayor rapidez la muerte de su padre que la pérdida de su patrimonio.

Nicolás Maquiavelo

El amor consuela como el resplandor del sol después de la lluvia.

William Shakespeare

¡Pero hay siempre los que quieren explotar el miedo, las diferencias para engrandecerse a sí mismos! ¿No conocemos eso desde siempre?, pero es preciso -no digo que haya que ceder a la brutalidad, tenemos que ser fuertes-, es preciso cultivar la confianza.

Yehudi Menuhin

La vida es un arco iris que incluye el negro.

Yevgeny Yevtushenko