No tengas miedo ni vergüenza por la dignidad de tus experiencias, tu lenguaje o tus conocimientos.
Jack Kerouac
Esa polilla de la voluntad que llamamos lástima.
Benito Pérez Galdós
Me gustaría que se me apareciera el fantasma de Marilyn Monroe por puro morbo: quisiera saber qué le pasó de verdad.
Chenoa
Las grandes cualidades naturales toman el nombre de algún gran vicio o de alguna gran virtud, según el buen o mal uso que de ellas se haga.
Denis Diderot
No hay duda de que la ficción hace un mejor trabajo con la verdad.
Doris Lessing
A la empresa compatriotas, que el triunfo es nuestro: vencer o morir sea nuestra cifra; y tiemblen, tiemblen esos tiranos de haber excitado vuestro enojo, sin advertir que los americanos del sud, están dispuestos a defender su patria; y a morir antes con honor, que vivir con ignominia en afrentoso cautiverio.
José Gervasio Artigas
No se debe tocar con ligereza lo que es peligroso dejar sin resolver.
Juan Luis Vives
La muerte es un sacramento del que sólo son dignos los más puros: muchos hombres se deshacen, pocos mueren.
Marguerite Yourcenar
Estados Unidos es el mayor exportador de violencia en el mundo.
Martin Luther King
El verdadero cínico, el cínico de nacimiento, sólo reconoce la fidelidad a sí mismo. Y se ahorra muchos trastornos.
Pedro Juan Gutiérrez
Digámonos con el pleno convencimiento de que nos decimos la verdad: alma mía, comienza hoy a hacer el bien, que hasta ahora no has hecho nada.
Pío de Pietrelcina
Castiga a los que tienen envidia haciéndoles bien.
Proverbio Árabe
Engels continuaba su razonamiento considerando este camino como necesario en un esfuerzo lento y perseverante para ganar a las ideas revolucionarias a la gran masa del pueblo, sin cuya intervención directa no era concebible la transformación completa de la organización social.
Santiago Carrillo
La belleza es aún más difícil de explicar que la felicidad.
Simone de Beauvoir
Alguien tiene que morir para que el resto de nosotros deberíamos valorar más la vida.
Virginia Woolf
La vida es corta, la obligación de odiar la acorta siniestramente.
Vitaliano Brancati