Frase de Isabel Allende

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Su vida estaba hecha de ruinas encadenadas sin variantes, salvo aquellas marcadas por las estaciones. Sólo existía trabajo y cansanci... - Isabel Allende

Su vida estaba hecha de ruinas encadenadas sin variantes, salvo aquellas marcadas por las estaciones. Sólo existía trabajo y cansancio para ella.

Isabel Allende

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No se puede acabar con el dominio de los tontos, porque son tantos, y sus votos cuentan tanto como los nuestros.

Albert Einstein

En la vida no tendrás todo lo que quieras, pero debes querer todo lo que tengas.

Anónimo

El inconsciente es la historia de la humanidad desde los tiempos inmemoriales.

Carl Gustav Jung

Los libros tenían alma, el alma de quien los había escrito y de quienes los habían leído y soñado con ellos.

Carlos Ruiz Zafón

¡Siento tantas cosas..., y mi pasión por ella lo devora todo! ¡Tantas cosas! ¡Y sin ella todo se reduce a nada!

Goethe

Las circunstancias y los demás seres no tienen la capacidad para producirnos malestar.

Gueshe Kelsang Gyatso

La injusticia es relativamente fácil de llevar; lo verdaderamente insoportable es la justicia.

H. L. Mencken

La estrechez espiritual origina casi infaliblemente la intolerancia.

Henri François Marion

Ante situaciones excepcionales en las que la democracia estuvo en peligro, asumió plenamente su papel como Jefe del Estado de una monarquía democrática y respaldó la Constitución y las instituciones.

José Luis Rodríguez Zapatero

Admiro a Frida Kahlo porque vestía de hombre, tenía bigote y, aún así, era capaz de ser glamorosa.

Madonna

Nunca faltará qué envidiar al que sea envidioso.

Manuel Tamayo y Baus

La elegancia es inferior a la virtud.

Mary Shelley

Formas que parecen ideas. Considerarlas verdaderas ideas.

Robert Bresson

En las dos últimas semanas antes del levantamiento, se advertía en algunos líderes del Gobierno cierto ánimo de provocar una sublevación.

Stanley G. Payne

Guárdate de que el adorno te aparte del camino recto, y de que la falsa imaginación te arroje al pozo.

Yalal ad-Din Muhammad Rumi