El paraíso de Mahoma o la unión delicuescente de los teósofos y místicos con la divinidad, conforme cada uno sienta, impondría a la razón su monstruosidad, y tanto valdría no tener ninguna como entregarla de tal modo a todos los ensueños.
Immanuel Kant
Evadirse de la prisión de la forma poética y de la sintaxis.
César Vallejo
La risa y la ironía son los medios que utiliza nuestro corazón para recordarnos que no somos prisioneros en este mundo, sino viajeros de paso.
Eben Alexander
La verdad no está siempre en el fondo de un pozo. En realidad, yo pienso que, en cuanto a lo que más importa conocer, es invariablemente superficial. La profundidad se encuentra en los valles donde la buscamos, pero no en las cumbres de las montañas, que es donde la vemos.
Edgar Allan Poe
Pero quién vio jamás el ruedo misterioso de tu falda mientras cortas las rosas en la tarde ni el roce y la tristeza de la lluvia como un ajeno llanto por mi cara.
Eliseo Diego
Es el nacionalismo el que engendra naciones, y no al contrario.
Ernest Gellner
Feliz es el hombre que encuentra un amigo verdadero, y más feliz aún el que encuentra en su esposa a ese amigo verdadero.
Franz Schubert
Demasiados amigos han desbaratado la confianza que puse en ellos, y el que es desleal con uno nunca le perdona a uno el haberle fallado; y cuanto mayor la traición, mayor es en mi país la ofensa del traicionado y siente el traidor mayor agravio.
Javier Marías
Aquí debo haber nacido y aquí debo haber muerto.
Kim Novak
Sólo zarpas y espinos nacen en el lugar donde acampan los ejércitos.
Lao-Tse
Sombras: frágil lienzo donde cree uno bocetar a gusto.
Paulo Neo
Nunca puede ser tan cumplida la satisfacción como ha sido grande el pecado.
Ramon Llull
Entre las características del mundo moderno no hay que olvidar la imposibilidad de apreciar en concreto la relación entre el esfuerzo y el efecto del esfuerzo. Demasiados intermediarios.
Simone Weil
Y en ese momento -susurró-, pronunciaste mi nombre en sueños. Lo dijiste con tal claridad que por un momento creí que te habías despertado, pero te diste la vuelta, inquieta, musitaste mi nombre otra vez y suspiraste. Un sentimiento desconcertante y asombroso recorrió mi cuerpo. Y supe que no te podía ignorar por más tiempo.
Stephenie Meyer
Es gran bien tener deseos, ya que no pueden ser grandes las obras.
Teresa de Jesús
Amo más al ratón Mickey que a cualquier mujer que haya conocido.
Walt Disney