Dos cosas constantes te revelan, te tienen de cuerpo entero en el instante, y son la cama y la mesa de madera, hechas a la medida del amor y del hambre.
Homero Aridjis
Una mentira no tendría ningún sentido a menos que sintiéramos la verdad como algo peligroso.
Alfred Adler
Si le das una oportunidad a este lugar, es posible que te guste.
Catherine Keener
Nada de lo dispuesto en un idioma es menos traducible que sus modos de subestimación.
George Steiner
Quien aspira a adquirir riqueza u honores no sabe amar.
José María de Pereda
A veces también tengo miedo de mi sangre, que late en las arterias como, en el silencio de la noche, un confuso ruido de pasos en habitaciones lejanas...
Luigi Pirandello
Vamos argentina, carajo!
Marcelo Araujo
La verdadera fuerza de un príncipe no consiste tanto en su capacidad para vencer a sus vecinos como en lo difícil que pueda ser para éstos atacarlo.
Montesquieu
Si un líder es un líder verdadero, él no tendrá la necesidad de anunciar ese hecho excepto por su conducta, su simpatía, entendimiento, justicia y el conocimiento de su trabajo.
Napoleon Hill
A los silencios también se los lleva el viento.
Sandro Centurión
A los que corren en un laberinto, su misma velocidad los confunde.
Séneca
Cuando me parece que la gente no me trata bien, considero cómo me trato a mí mismo.
Spencer Johnson
Solo en las nubes azules Tumbado en un edredón. ¡Yupi! Tú no puedes verme Pero yo a ti sí.
Syd Barrett
Tal vez ninguna persona puede ser un poeta, o incluso disfrutar de la poesía, sin una cierta enajenación mental.
Thomas Macaulay
Muero ayer. He nacido mañana. Ando donde hay espacio. Mi tiempo es cuando.
Vinicius de Moraes
Hubiera preferido mil veces ser una de esas personas, como Richard, que hacían las cosas por las cosas mismas.
Virginia Woolf