El hombre más feo, más débil, el hombre más indigno ha de triunfar por fuerza, si está dispuesto a dar hasta la última gota de su sangre. Ninguna mujer puede rechazar el don del amor absoluto.
Henry Miller
Si gano un torneo, lo hago por mí mismo. Yo juego. Nadie me ayuda.
Bobby Fischer
La tierra es para quien la trabaja.
Emiliano Zapata
No le era posible comprender por qué le había sucedido algo tan maravilloso. No tenía explicación. Sólo varios meses más tarde, estando de vuelta en Misselthwaite, recordaría ese momento al descubrir por casualidad que ese mismo día Colin, al entrar en el jardín secreto, había gritado: Viviré por siempre jamás.
Frances Hodgson Burnett
Esta siguiente canción sólo está dedicada a la gente guapa que está aquí esta noche. Esto quiere decir a todos ustedes. Gracias por venir y hacer de esto una gran ocasión.
Freddie Mercury
Hay cuestiones en las que no le corresponde al hombre decidir sobre la verdad y la no-verdad: todas las cuestiones más altas, todos los problemas supremos del valor están más allá de la razón humana.
Friedrich Nietzsche
No se debe confundir la verdad con la opinión de la mayoría.
Jean Cocteau
Yo daría una estrella por volver a tenerte y por una mirada, un pedazo del mar, y por una caricia este cielo completo y no se qué daría si me fueras a amar.
Jenniley Bonilla
¿La gente está loca? No, la gente está manipulada.
José Luis Sampedro
Los fallos de nuestro sistema financiero son señal de unos fallos más amplios en nuestro sistema económico, y los fallos de nuestro sistema económico reflejan problemas más profundos de nuestra sociedad.
Joseph Stiglitz
algunas personas sienten la desgracia como otros aman: de un modo íntimo, intenso y sin remedio.
Khaled Hosseini
Pero mucho tiempo atrás había aprendido que cuando se aventuraba en el reino de la fantasía, debía hacerlo sola. Era una senda encantada por donde no podía seguirla ni el ser más querido.
Lucy Montgomery
El mejor momento de mi vida fue cuando sentí estar enamorado por primera vez.
Luis Miguel
Cuando se ama de verdad -decían nuestros antiguos trovadores-, se oiga lo que se oiga, se vea lo que se vea en contra de la amada, no se debe dar crédito ni a los oídos ni a los ojos; hay que escuchar únicamente al corazón.
Marqués de Sade
Entre col y col, lechuga.
Proverbio
La vida es la vida, defiéndela.
Teresa de Calcuta