El culpable tiene sus labios prestos a toda acusación.
Henry Fielding
En nuestros países monogámicos, casarse significa perder la mitad de los derechos propios y doblar los propios deberes.
Arthur Schopenhauer
Jamás seas mezquino en nada; jamás seas desleal; jamás seas cruel.
Charles Dickens
La mayoría se fija mas en mi cuerpo que en mi música, eso no me gusta.
Christina Aguilera
El arte y la ciencia tienen su punto de reunión en el método.
Edward Bulwer-Lytton
Nunca somos tan felices, ni tan infelices como pensamos.
François de La Rochefoucauld
El genio es aquello que provoca la inercia de la humanidad a aprender.
Henri Bergson
El crimen tiene una historia respetable: el Londres de Shakespeare, la Florencia de los Medici. Nidos de asesinatos, venenos y ejecuciones con garrote. Dime una época en que haya florecido el orgullo cívico y las artes y no hubieran crímenes generalizados..
J. G. Ballard
Kosecki es un tontito, un mercenario y un imbécil que cuanto antes se vaya será mejor.¿Qué ha demostrado en el Atlético? ¿Dónde están los goles? Que traiga el dinero y se marche.
Jesús Gil y Gil
La mujer domina con súplicas; el hombre, con órdenes: la una, si quiere; el otro, si puede.
Johann Christoph Rost
La luz es la sombra de Dios; la claridad es la sombra de la luz.
Joseph Joubert
La historia de la evolución es que la vida escapa a todas las barreras. La vida evade los encierros. La vida se expande a nuevos territorios. De manera dolorosa, quizás hasta peligrosa, pero la vida encuentra el modo. No pretendo filosofar, pero así son las cosas.
Michael Crichton
Cuantos más abogados, más largo el proceso; cuantos más médicos, el proceso más corto.
Moritz Gottlieb Saphir
La ira se halla también en otros animales; la sabiduría, sólo en el hombre.
Pitágoras
Nullum esse librum tam malum ut non áliqua parte prodesset.
Plinio
No me había dado cuenta hasta ahora de qué necesitada he estado de cercanía humana. De sentirlo a él a mi lado en la oscuridad. Desearía no haber malgastado el último par de noches dejándolo fuera. Me hundo en el sueño, envuelta en su calor, y cuando abro los ojos de nuevo, la luz del día entra por las ventanas.
Suzanne Collins