Nadie comprende a nadie. Carecemos de tiempo para observar a los demás y entender sus actos; no tenemos tiempo más que para hablar mal de ellos.
Henry Becque
Mi amor es como el viento, dura un momento, se vuelve pensamiento, duda y tormento.
Alfredo Zitarrosa
Nunca fue grande una nación, sino hasta que llegó a conocer que no había en el mundo lugar alguno al que pudiera acudir en demanda de socorro.
Charles Dudley Warner
La vida de un día no satisface, ese anhelo de vivir; el amor de un instante no puede llenar los deseos de este corazón inquieto.
Emilio Castelar
Lo primero que el espíritu sabe de sí. En su forma de individuo, es que siente. Aquí todavía no hay ninguna objetividad. Nos encontramos determinados de este y de aquel modo.
Georg Wilhelm Friedrich Hegel
Si hubiera de besarte aquí lo llamarían un acto de terrorismo; así es que llevémonos las pistolas a la cama y despertemos a la ciudad a medianoche como bandidos borrachos celebrando con andanadas, el mensaje del sabor del caos.
Hakim Bey
La mayor parte de la escritura se hace lejos de la máquina de escribir.
Henry Miller
El futuro es incierto... pero esta incertidumbre está en el corazón mismo de la creatividad humana.
Ilya Prigogine
Cuando uno representa un papel aporta algo de sí mismo al personaje. Si no es así no está actuando, está mintiendo.
Johnny Depp
El tiempo descubre a los que tienen la moral en piezas, para mostrarla, aunque de su paño jamás corten un traje para cubrir su mediocridad.
José Ingenieros
La verdadera enseñanza no es aquella que infunde nociones bien definidas, sino la que capacita para que cada uno se forme por si mismo buenas nociones.
Joseph-Marie Degérando
Asaltan a un hombre y lo dejan completamente desnudo, eso es comicidad. En cambio, si lo dejan en camiseta y calzoncillos, es humorismo. Yo hago humorismo, porque prefiero que la gente se quede, por lo menos, en ropa interior.
Juan Verdaguer
No hay gen para el espíritu humano.
Jude Law
En cada uno de nosotros hay un artista, un amante y un guerrero.
M. Velandia
Los ejércitos son los más grandes apoyos de la tiranía.
Pancho Villa
La lluvia le dijo al viento: Empuja tú que yo azoto y tánto hirieron el soto que de las flores altivas, doblegadas pero vivas, yo sentía el sufrimiento.
Robert Frost