El pensamiento no es más que un relámpago en medio de una larga noche. Pero ese relámpago lo es todo.
Henri Poincaré
No es menos importante enseñarles a los niños a examinar todas las personificaciones, todas las metáforas, todas las abstracciones que encontrasen en los artículos que leyesen o en los discursos que escuchasen. Deben aprender a traducir todas esas palabras desprovistas de contenido en términos que se refieran a la realidad concreta contemporánea.
Aldous Huxley
Al más fuerte...
Alejandro Magno
Diez millones de copias vendidas es como diez veces el estadio Santiago Bernabeu lleno de personas con mi disco en la mano. Si lo pienso, me impresiono...
Alejandro Sanz
Por muy alto que sea un árbol, sus hojas siempre caen hacia la raíz.
Anónimo
La ciencia tiene mucho que decir acerca de lo que es posible. La ciencia no tiene nada que decir sobre lo que está permitido.
Charles Krauthammer
Oración: una solicitud de que las leyes de la naturaleza se suspendan en beneficio del solicitante, que confiesa no merecerlo.
Christopher Eric Hitchens
Para mi nada pido; dadme una rama de árbol, una roca, y la tendré por nido.
Diego Dublé Urrutia
La prudencia en el ahorro consiste no tanto en saber guardarse de los gastos, puesto que éstos son muchas veces necesarios, sino en saber gastar con ventaja.
Francesco Guicciardini
Solo me cabe esperar que en el éxito y en el fracaso me pueda siempre mantener una cosa: esa absoluta confianza en Dios que precisamente supone la fe cristiana.
Hans Küng
El universo es una esfera infinita cuyo centro está en todas partes y la circunferencia en ninguna.
Jorge Luis Borges
Si usted amenaza a la gente con que los va a degollar, luego no los degüella, pero los explota, los engancha a un carro, los azota, y dicen bueno por lo menos, se dice eso que es tan grave, de virgencita que me quede como estoy.
José Luis Sampedro
Gracias por su sinceridad, coronel -respondió Fitz-. Pero entré en el ejército para ganarbatallas, no para que me ascendieran.
Ken Follett
Aplanar mis imágenes, sin atenuarlas.
Robert Bresson
No puedo rendirme sin luchar.
Suzanne Collins
Las cosas fabricadas han perdido la noble indiferencia por las esferas de la riqueza y la pobreza. Cada cosa hoy deja su impronta sobre su propietario, que no tiene ya otra elección que presentarse como un pobre diablo o, al contrario, como especulador.
Walter Benjamin