A veces echo de menos ser desgraciada, es muy romántico.
Helena Bonham Carter
El hombre se habitúa a los cambios continuos con tanto gusto como a la inmovilidad, y una vez extendido el contagio reformador, no hay peligro de innovar.
Ángel Ganivet
Si quieres saber el valor del dinero, trata de conseguirlo prestado.
Benjamin Franklin
Desde ahora en adelante no haré nada que no quiera hacer. El mundo me debe felicidad, realización y éxito. Solo estoy aquí para aprovecharlo.
Bill Watterson
Los verdaderos líderes se hacen a sí mismos accesibles y disponibles para los demás.
Colin Powell
Sólo le quedaba ir al encuentro del pasado remoto que estaba en su memoria. Si lograba encontrar los restos de la casa junto al río encontraría su presente, dejaría de ser sombra flotando en ciudades sin memoria. ¡Todos habían muerto! Sólo quedaba ella, perdida entre millones de desconocidos.
Elena Garro
Que queriendo como bien te quise yo, quien se viene hoy a marchar pero cierto es que decir ya no te amo prolongo una despedida que elegiste tiempo atrás.
Fernando Delgadillo
Quiero volver a tierras niñas; llévenme a un blando país de aguas. En grandes pastos envejezca y haga al río fábula y fábula.
Gabriela Mistral
La raíz zamorana, la raíz bolivariana y la raíz robinsoniana: tres raíces de un mismo tronco y un árbol enraizado en el pensamiento nacional; ideología que impulsa el nuevo y verdadero bolivarianismo.
Hugo Chávez
Los funerales celebran el cruce de otra frontera, en muchos sentidos el más formal y prolongado de todos.
J. G. Ballard
La vida cristiana consiste de fe y caridad.
Martín Lutero
La juventud sonríe sin motivo. Es uno de sus mayores encantos.
Oscar Wilde
Si la quisiera sin lucha la desearía mil veces menos.
Pierre-Augustin de Beaumarchais
Hacen falta sueños para aferrarse a la realidad.
Ricardo Arjona
¿No tienes enemigos? ¿Es que jamás dijiste la verdad o jamás amaste la justicia?
Santiago Ramón y Cajal
Quizás el océano había logrado trastocar mi cerebro, me había sumergido en un mar de alucinaciones y, si era así, resultaba inútil malgastar las fuerzas en vanos intentos por resolver tantas adivinanzas, por desvelar el misterio de tantas realidades inexistentes.
Stanisław Lem