Tengo la certeza de que conseguí destacarme con la música.
Hector Berlioz
Pasar de la pobreza a la opulencia, no es más que cambiar de miserias.
Axel Oxenstierna
¡Qué difícil es hacer creer a los hombres que cualquier otro hombre pueda actuar por desinterés!
Benjamin Robert Haydon
Trabajar en el cine era vergonzoso, era lo más despreciable. Gracias a Dios se inventó la televisión.
Billy Wilder
La transformación del socialismo utópico en una doctrina de base científica, se debe a Carlos Marx y Federico Engels.
Felipe González
Dichoso quien por mí pena y suspira, si cabe tanto bien en pecho humano.
Fernando de Herrera
Él alcanzó una grandeza sin igual.
James Clerk Maxwell
A la puta calle, ¡venga! Siempre me toca al más tonto al lado.
Jesús Gil y Gil
De ti depende y de mí que entre los dos siga siendo ayer noche, hoy por la mañana.
Joaquín Sabina
Desde ahora, más que antes, la lucha se empeña con una divisoria que separa los dos campos: revolución y contrarrevolución. Esto lo dice ABC, y no le falta razón. Una unión tan amplia, por nuestra parte, nos dará el triunfo seguro. Y, los mismos fascistas lo dicen, no hay más que dos frentes: Fascismo y Antifascismo, Revolución o Contrarrevolución.
José Díaz Ramos
Un espacio implica la conciencia de las posibilidades de la luz.
Louis Kahn
Lo primero que hace una mujer cuando quiere que un hombre la alcance es echar a correr.
Molière
El peor de todos los pasos es el primero. Cuando estamos listos para una decisión importante, todas las fuerzas se concentran para evitar que sigamos adelante. Ya estamos acostumbrados a esto. Es una vieja ley de la física: romper la inercia es difícil. Como no podemos cambiar la física, concentremos la energía extra y a si conseguiremos dar el primer paso. Después el camino mismo ayuda.
Paulo Coelho
Besa mi boca, más dime qué es lo que mi corazón busca.
Tove Ditlevsen
El orgasmo es el gran comedor de palabras. Sólo permite el gemido, el aullido, la expresión infrahumana, pero no la palabra.
Valérie Tasso
Los amigos nos abandonan con demasiada facilidad, pero nuestros enemigos son implacables.
Voltaire