Sudo me acuerpo miro hacia el vértigo y trato de no mirar. Asciendo, asciendo hacia la flor Y cuando allí está la arranco y la guardo en mi bolsillo como esperanza, luego viene el descenso ¿Quién se merece la flor? ¿Qué hombre la merece?
Hanni Ossott
El rechazo es una forma de acercamiento.
Anónimo
Sigo esperando la estación que te traerá a casa: no sé cuántas veces he plantado la semilla, regado las plantas, contado los capullos.
Archie Randolph Ammons
Los ponemos en un avión y en el camino los van tirando para abajo.
Augusto Pinochet
La felicidad no está en el destino, sino en el camino que recorremos.
Cecilia Ahern
Cuando los hombres controlen los gobiernos, los hombres no necesitarán gobiernos. Hasta entonces estamos jodidos.
Charles Bukowski
Esos silenciofóbicos. Esos ruidoadictos.
Chuck Palahniuk
Es más deseable cultivar el respeto al bien que el respeto a la ley.
Henry David Thoreau
Soy como un camaleón, influenciado por lo que está pasando. Si Elvis puede hacerlo, yo puedo hacerlo. Si los Everly Brothers pueden hacerlo, Paul y yo podemos. Lo mismo con Dylan.
John Lennon
El mejor espíritu de sacrificio es la perseverancia en el trabajo comenzado: cuando se hace con ilusión, y cuando resulta cuesta arriba.
Josemaría Escrivá de Balaguer
México siempre fiel.
Juan Pablo II
Todo lo que quiero es que me caven un hoyo y que mi tumba diga: aquí cayó un loco del ajedrez. No jugaba bien, pero le gustaba jugar. Nunca pudo enfrentarse a un campeón. Murió como vivió: esperando.
Lu Xun
El mayor desafío que se le presenta hoy por hoy y que se le presenta sistemáticamente a un escritor de ficción es la novela. Yo no sé bien de dónde procede eso, por qué esa exigencia y hasta qué punto la novela es la forma más justificable, porque hasta cierto punto tiene una categoría artística superior, aunque hay excepciones.
Rodolfo Walsh
Quien camina rengo, aún camina.
Stanisław Lem
Si los ciudadanos activos o preocupados renuncian a la política, están abandonando su sociedad a sus funcionarios más mediocres y venales.
Tony Judt
Córtela en cuatro, no creo que pueda comer ocho.
Yogi Berra