El atletismo vocal de un divo de ópera no tiene más importancia que el atletismo muscular de un héroe de halterofilia.
Gustavo Bueno
Cuando viajo por Europa paso bastante tiempo en la habitación del hotel, repasando la cultura local a través de los programas de televisión.
Barbara Probst Solomon
No se aprende nada importante en la vida. Simplemente se recuerda.
Carlos Ruiz Zafón
Los cautelosos muy poco se equivocan.
Confucio
No dejes que la gente te trate mal.
Cuba Gooding Jr.
En Francia el utopismo tuvo un carácter más filosófico que en Inglaterra. Su primer representante fue el conde Saint Simon (1760-1825). Según el, la sociedad avanza constantemente hacia la perfectibilidad,...
Felipe González
¿Quién era el que insultaba? Que venga pa acá... ¡Mira el valiente, mira el valiente, mira el valiente cómo da la cara! ¡Qué machotes que son... estos hijos de puta!; a un joven después de que le llamara fascista.
Francisco Javier León de la Riva
Ya se trate de ciencia o historia, es preciso desconfiar de la ignorancia que se encierra bajo el término "fatalidad".
Gustave Le Bon
A la sazón, el verano y el humo habían pasado. Los delfines aún jugaban, arqueando el horizonte, pero sólo para levantar recuerdos de puertas espirituales.
Hart Crane
¿Es lógico por mi parte preguntar si ambas van a venir a mi habitación?
Javier Bardem
No sujetéis mi voz, que va de paso.
Juan Antonio Villacañas
El niño tiene cien lenguajes, cien manos, cien pensamientos, cien formas de pensar, de jugar y de hablar, cien siempre cien formas de escuchar, de sorprender, de amar, cien alegrías para cantar y entender.
Loris Malaguzzi
El libre pensamiento de una edad es el sentido común de la siguiente.
Matthew Arnold
En la adversidad una persona es salvada por la esperanza.
Menandro
Que no te espante la pobreza; nadie vive tan pobre como cuando nació.
Séneca
Los intentos de superar esa dualidad, de domesticar lo díscolo y domeñar lo que no tiene freno, de hacer previsible lo incognoscible y de encadenar lo errante son la sentencia de muerte del amor.
Zygmunt Bauman