La audacia de su deseo protestó contra el servilismo de su conducta y, por una especie de hipocresía ingenua, estimó que esta prohibición de verla era para él como un derecho a amarla.
Gustave Flaubert
Cuando se es ensalzado por el enemigo, es que se ha hecho algo mal.
Amintore Fanfani
Dios es el único ser que para reinar no tuvo ni siquiera necesidad de existir.
Charles Baudelaire
La hipótesis es una interpretación anticipada y racional de los fenómenos de la naturaleza.
Claude Bernard
Verde que te quiero verde. Verde viento. Verdes ramas. El barco sobre la mar y el caballo en la montaña.
Federico García Lorca
¿Por qué volvéis a la memoria mía, tristes recuerdos del placer perdido...?
José de Espronceda
No valen antifaces en los países de prensa libre, que sale cada mañana, como un viento duende, levantando caretas.
José Martí
No nos habría sido posible conquistar el poder o utilizarlo como lo hemos hecho sin la radio. La radio es el intermediario más influyente e importante entre un movimiento espiritual y la nación, entre la idea y el pueblo.
Joseph Goebbels
La intensidad del sentimiento es felicidad.
Leopold Schefer
Cuando la pena proviene del candor puede ser dulce.
Mario Benedetti
Tanto dolor se agrupa en mi costado, que por doler me duele hasta el aliento.
Miguel Hernández
Era el sueño de su vida súbitamente convertido en realidad, la riqueza y el lujo que siempre había deseado. Su ambición de fasto y poder era capaz de hacerla enfermar, era un instinto devorador que seguramente sólo la riqueza lograría apaciguar.
Naguib Mahfuz
Trata de dejar a este mundo en mejores condiciones de como lo encontraste.
Robert Baden-Powell
Lo que define al ateísmo es la reducción del hecho religioso al hecho humano: son los hombres los que han creado a los dioses.
Roger Garaudy
La única manera de hacer un fragmento es usando una máscara, una máscara que es un objeto en sí. No podría hacer una cabeza decapitada o la mitad de un cuerpo sin un objeto.
Ron Mueck
La mujer que quiera ser virtuosa no debe tener piedad de sus manos.
Victor Hugo