¡Hasta un niño de cinco años sería capaz de entender esto!... Rápido, busque a un niño de cinco años, a mí me parece chino.
Groucho Marx
¿El pasado puede renacer?
Alain-Fournier
Un gobierno democrático es el único en el que los que votan por un impuesto puede escapar a la obligación de pagar.
Alexis de Tocqueville
Pero a mí nada me entusiasmaba tanto como el mar, y dominado por este deseo, me negaba a acatar la voluntad, las órdenes, más bien, de mi padre y a escuchar las súplicas y ruegos de mi madre y mis amigos. Parecía que hubiese algo de fatalidad en aquella propensión natural que me encaminaba a la vida de sufrimientos y miserias que habría de llevar.
Daniel Defoe
¡Patria o Muerte, Venceremos!
Fidel Castro
Yo le quiero a él, pero esto pasará, esto tiene que pasar. Es imposible que no pase, está pasando ya, lo siento... ¿Quién sabe? Quizá termine hoy mismo, porque le odio, porque se ha reído de mi, mientras que usted ha llorado aquí conmigo.
Fiódor Dostoyevski
Un cristiano no es más que un pecador que se ha puesto a sí mismo en la escuela de Cristo para el honesto propósito de ser mejor.
Henry Ward Beecher
... Un famoso poeta es menos inventor que descubridor.
Jorge Luis Borges
Hay que provocar en el que escucha que piense por su cuenta. No hay que adoctrinar, hay que provocar. Me gustaría pensar que, en algún momento, algo de lo que digo les sirva de provocación para que salten por encima de mí, para que se hagan y lo hagan mejor todavía.
José Luis Sampedro
La verdad es como la pintura, existen muchos artefactos que pueden diluirla.
Leandro Kabakian
No vine a la política a hacerme rico ni famoso.
Mauricio Macri
No te fíes de consejos, aunque te los quieran dar; guíate de lo que salga de tu propio natural.
Melchor de Palau
No llegué lejos por hacerme el simpático.
Mucho Muchacho
La crítica no es más que una forma disimulada que tenemos para mostrar nuestra superioridad sobre los demás.
Renny Yagosesky
Si la vida son dos días quiero vivirlos contigo y solo contigo.
Simón Bolívar
Yo soy el dueño de mi destino; yo soy el capitán de mi alma.
William Ernest Henley