Se dice que las mujeres son vanidosas por naturaleza; es cierto, pero les queda bien y por eso mismo nos agradan más.
Goethe
Yo no enseño a mis alumnos, solo les proporciono las condiciones en las que puedan aprender.
Albert Einstein
No estamos hablando de alzar un nuevo estandarte político, sino más bien de librar la vieja bandera socialista de aquellos que se han envuelto en sus pliegues.
Benito Mussolini
Si no hay café para todos, no habrá para nadie.
Che Guevara
Estás condenado a ser tú.
Chuck Palahniuk
A veces no sabes el valor de un momento hasta que se convierte en memoria.
Dr. Seuss
Que los únicos generales que se deben seguir a ciegas son los generales de los soldaditos de plomo.
Georges Brassens
Era un hotel triste. Triste como un perro negro de tres patas empapado por la lluvia de diciembre.
Haruki Murakami
No venimos a hacer la guerra a la fe sino a los abusos del clero. Nuestro deber como mexicanos no es destruir el principio religioso sino los vicios o abusos de la Iglesia para que, emancipada la sociedad, camine.
Ignacio Ramírez
Cuando las pequeñas prioridades demandan mucho de nosotros, surguen grandes problemas.
John C. Maxwell
Ama tu vida. Confía en el Tao. Haz el amor con el invisible origen sutil del universo y te darás a ti mismo lo que necesitas. No tendrás que acudir a esconderte en retiros espirituales.
Lao-Tse
Entreveía la posibilidad de helenizar a los bárbaros, de atizar a Roma, de imponer poco a poco al mundo la única cultura que ha sabido separarse un día de lo monstruoso, de lo informe, de lo inmóvil, que ha inventado una definición del método, una teoría de la política y de la belleza.
Marguerite Yourcenar
Los padres deben ser estrictos, pero también han de ser cariñosos y amables.
Meg Meeker
Se admira a alguien por lo que hace, por lo que es, por cómo se las arregla para andar por el mundo.
Paul Auster
El amor es una deliciosa flor; pero es preciso tener el valor de ir a cogerla al borde mismo de un horrible precipicio.
Stendhal
Cuando los adversarios llegan para atacarte, no luchas con ellos, sino que estableces un cambio estratégico para confundirlos y llenarlos de incertidumbre.
Sun Tzu