Todos vivimos del pasado y nos vamos a pique con él.
Goethe
Es al buscar la verdad cuando encontraremos la iluminación, no al declararla.
Blanca Miosi
Hay muchos literatos que, pretendiendo castigar el estilo, castigan a los lectores.
Clarín
Yo he hecho casi de todo en televisión y en radio, pero presentar un informativo de una hora en directo va a ser como pilotar un Jumbo sin tener horas de vuelo.
Fernando Sánchez Dragó
El médico puede enterrar sus errores, pero el arquitecto lo único que puede hacer es aconsejar a su cliente que ponga enredaderas.
Frank Lloyd Wright
La ciencia que el oído percibe, derrámala por la boca. Agranda aún más la sabiduría compartiéndola con otros.
Isidoro de Sevilla
El amor es así, como el fuego; suelen ver antes el humo los que están fuera que las llamas los que están dentro.
Jacinto Benavente
Miedo de lo que hay en nuestro interior, miedo de lo que hay en el interior de los demás, miedo de lo que hay fuera. Nos asustan los cambios. Nos asustan quedarnos igual. Nos aterroriza cualquier cosa fuera de lo corriente, o un cambio en la rutina. Todo el mundo quiere ser distinto, pero ésa es la mayor amenaza.
John Katzenbach
Soy una persona demasiado versátil, sometida a cambios de humor y carente de pasión.
Kurt Cobain
A veces me pregunto si algún díaDios nos perdonará todas nuestras ofensas y el mal que nos hacemos los unos a los otros; y después me doy cuenta que Dios hace mucho tiempo que se fue de este mundo.
Leonardo DiCaprio
La lengua es la casa de la verdad del ser.
Martin Heidegger
La fe es la puerta; la caridad la perfección. Ni la fe sin caridad, ni la caridad sin fe.
Miguel Servet
A los hombres les va bien un aspecto descuidado.
Ovidio
Queridos jóvenes, no enterréis vuestros talentos, los dones que Dios os ha regalado. No tengáis miedo de soñar cosas grandes.
Papa Francisco
Una acción es un pensamiento que se manifiesta.
Paulo Coelho
La cena era picadillo de cordero y pan con mantequilla; como podrán imaginar, con el hambre que tenía enseguida di buena cuenta del refrigerio. Mientras comía, se oyeron las lentas campanadas del reloj que yo había oído antes, dando las nueve y media.
Sarah Waters