Baco ha ahogado más hombres que Neptuno.
Giuseppe Garibaldi
Esta sociedad nos da facilidades para hacer el amor, pero no para enamorarnos.
Antonio Gala
La sociedad nos trató como mierda y ahora les vamos a dar por el culo. El mundo está dominado por niños bonitos hijos de papá... dios, ¡basta ya de mierdas light! Basta ya de colonias, de anuncios de coches, de aguas minerales... ¡no queremos oler bien, no queremos adelgazar! Sólo quedamos nosotros, amigos, todo el mundo es tonto o moderno.
Antonio Resines
El viento aúlla como un martillo, la noche sopla fría y lluviosa, mi amor es como un cuervo con un ala rota en mi ventana.
Bob Dylan
Lo que posees acabará poseyéndote.
Brad Pitt
Entre los que son igualmente malos no hay paz si no es la impuesta por el miedo de alguno que es peor.
Concepción Arenal
Hay que buscar la poesía no en las palabras yuxtapuestas, sino en la atmósfera que crean estas yuxtaposiciones.
Émile Verhaeren
El ridículo deshonra más que el mismo deshonor.
François de La Rochefoucauld
El espacio celeste, una gota de sonido que se rompe. Nubes de pájaros. Colores. Paisajes a la deriva. Signo sobre signo en un rostro. Escritura de la vida.
Halfdan Rasmussen
Obra de modo que la máxima de tu voluntad pueda ser en todo tiempo principio de una ley general.
Immanuel Kant
No lloréis, bichos, que hasta los astros sufren desengaños.
Kobayashi Issa
Todo es mucho más sencillo cuando tienes una mujer a tu lado. Parece mentira, pero te crees capaz de cualquier cosa. Y no te das cuenta, hasta que la pierdes... De hasta qué punto te apoyabas en ella.
Laura Gallego García
Son mis amigos los héroes de toda una vida, dulce emoción que transpone la cruel realidad.
Miguel Abuelo
Quien todo lo puede ha de temerlo todo.
Pierre Corneille
Tu tío no querría que viviéramos ni un segundo, con la venganza en nuestros corazones. Es como un veneno, cuando se apodera de ti, sin darte cuenta, te convierte en algo espantoso.
Rosemary Harris
La evolución espiritual no se manifiesta por la posibilidad de almacenar conocimientos, declamar verdades u obrar milagros, sino por la capacidad de corregir los propios errores.
Rudolf Steiner