Uno solo es inmutable, eterno y dura para siempre, uno y el mismo consigo mismo. Con esta filosofía mi espíritu crece, mi mente se expande.
Giordano Bruno
El amor es para el niño lo que el sol para las flores; no le basta el pan: necesita caricias para ser bueno y fuerte.
Concepción Arenal
Todo pueblo colonizado -es decir, todo pueblo en cuyo seno haya nacido un complejo de inferioridad a consecuencia del enterramiento de la originalidad cultural local- se sitúa siempre, se encara, en relación con la lengua de la nación civilizadora, es decir, de la cultura metropolitana.
Frantz Fanon
Lo que mucho ocupa termina por preocupar.
Friedrich Nietzsche
En la contención es donde primero se muestra el Maestro.
Goethe
Adelante trabajando siempre logrando siempre buscando y aprendiendo a forjar y esperar.
Henry Wadsworth Longfellow
No conocemos ninguno de esos 'saltos cuánticos' que crean nuevas especies, puesto que la mayor parte de las mutaciones genéticas operan en contra de la supervivencia del individuo.
Irving Kristol
¿Cómo va a tenerse derecho a lo que uno no ha construido ni se ha ganado?
Javier Marías
Siento que Dios me llama a hacer el bien en la tierra.
Jerónimo Usera
Ante todo, es preciso marchar cautamente y no dejarse llevar por optimismos exagerados.
José Díaz Ramos
Escribir sobre la melancolía solo tendría sentido para aquellos a quienes la melancolía satura o si el escrito viniera de la melancolía. Trato de hablarles de un agobio de tristeza, de un dolor intransmisible que nos absorbe a veces, y a menudo, perdurablemente, al punto de hacernos perder el gusto por toda palabra, por todo acto, el gusto mismo por la vida.
Julia Kristeva
La virtud, como el arte, hallarse suele cerca de lo difícil.
Lope de Vega
El que ha llegado tan lejos ya no se confunde, ha dejado también de trabajar.
Max Planck
Haciéndote pasar por otra persona. Nadie compra las cartas de Lee Israel.
Richard R. Grant
Merece salir engañado el que, al hacer un beneficio, tenía cuenta con la recompensa.
Séneca
Considera el hombre como un caso desgraciado el verse cercenado en medio de sus proyectos; cuando la verdadera desgracia (debía creerlo así) fue el haberlos formado.
Walter Savage Landor