Como pianista, está en la parte superior. Más de eso no se puede dar. Pero le queda la composición: no hay límites.
Gioachino Rossini
El amor tiene dos leyes: la primera, amar a los otros; la segunda, eliminar de nosotros aquello que impide a los otros amarnos.
Alexis Carrel
Quien lucha, puede perder; quien no lucha, ya perdió.
Anónimo
La existencia es un viaje en el que no existen los caminos llanos: todo son subidas o bajadas.
Arturo Graf
Yo transmito que soy muy yo, y que voy de yo por la vida. Soy una tía a la que no doblan. Yo no renuncio a mis vaqueros ni a nada. Cuando deje de ser ministra seguiré siendo yo, que es mi verdadero cargo.
Carmen Calvo Poyato
Un hombre sabio se procurará más oportunidades de las que se le presentan.
Francis Bacon
En la actualidad somos más sensibles a la escazes de tiempo... nos quejamos menos de tener poco dinero o poca libertad que de tener poco tiempo.
Gilles Lipovetsky
Los verdaderos fascistas quieren aniquilar a todos sus enemigos y luego crear una sociedad radicalmente nueva.
Ken Follett
En sociedades destrozadas por la guerra, frecuentemente son las mujeres las que mantienen a la sociedad en marcha... Usualmente son las principales defensoras de la paz.
Kofi Annan
Adoro los misterios. Hay partes que parecen no encajar, pero al final lo hacen y todo cobra sentido.
Kristen Wiig
El fútbol se parece a la adolescencia. Es muy carnal, muy del corazón.
Manuel Preciado
El Presidente de la Comisión, M. Delors, dijo el otro día en una conferencia de prensa que quería que el Parlamento Europeo fuera el cuerpo democrático de la Comunidad, que la Comisión fuera el Ejecutivo y que el Consejo de Ministros fuera el Senado. No. No. No.
Margaret Thatcher
Usted no es solamente responsable de lo que dice, sino también de lo que no dice.
Martín Lutero
Las apariencias engañan la mayoría de las veces; no siempre hay que juzgar por lo que se ve.
Molière
Que de esta plaza no salga un sólo gesto de rencor, sino de dignidad; que no salga un gesto de odio, pongamos la otra mejilla.
Néstor Kirchner
La moda comienza y termina siempre por las dos cosas que más aborrece: la singularidad y la vulgaridad.
William Hazlitt