El Corazón. Yo lo usaba en los ojos.
Gilberto Owen
En los países fascistas toda actividad en favor del pacifismo es hoy imposible.
Albert Einstein
Lo único que deseo es un cuarto en alguna parte, lejos del aire frío de la noche. Con una silla enorme, chocolate y una estufa a leña.
Audrey Hepburn
Dios... Un ser cuya única definición es que está más allá de de la capacidad de la mente humana para ser comprendido.
Ayn Rand
El Ferrari es un sueño, sueño para los pocos afortunados que lo tienen y para la mayoría de las personas que no.
Enzo Ferrari
Súbitamente empezó a pensarse que el hecho de que el gobierno hubiera quedado sometido al control de la mayoría hacía innecesario mantener sobre él cualquier limitación, por lo que cabía impunemente abandonar todas las salvaguardias constitucionales.
Friedrich Hayek
No sé si los científicos tienen razón cuando dicen que la intervención médica produciría hombres fuertes y sanos. Estoy seguro de que, si así fuese, el primer acto de los hombres fuertes y sanos sería aplastar la intervención médica.
Gilbert Keith Chesterton
Bien sé que no somos iguales ni podemos serlo; pero, en mi opinión, el que cree preciso vivir alejado de lo que se llama pueblo para que éste le respete, es tan despreciable como el mandria que se oculta de sus enemigos por temor de que le venzan.
Goethe
La grandeza del hombre se puede medir por lo que deja plantado para que se desarrolle, y si puso o no a pensar a otros en nuevas direcciones con un vigor que persistiera después de él Si se aplica esta prueba, Jesús está en primer lugar.
H. G. Wells
A menudo, los labios más urgentes, no tienen prisa dos besos después.
Joaquín Sabina
Y luego Aragón es el futuro, sin darse cuenta que somos el último pedo del culo.
Kase.O
- ¿Temes a la muerte, Espartaco? - No más que a la vida.
Kirk Douglas
El ayer ya dispuso del hoy la suerte triste.
Omar Jayam
Y tampoco trajo cambios el corrupto PSOE.
Pablo Hasél
Proporción es belleza en el orden de las medidas.
Ramon Llull
La vejez es un estorbo para la creatividad pero no puede aplastar mi espíritu juvenil.
Rembrandt