Por fin veo que las revoluciones del poder supremo recaen en los más abandonados.
Georges-Jacques Danton
Hay días que me encuentro bien y otros en los que quiero arrastrarme hasta un agujero y morirme.
Aaron Taylor-Johnson
Yo estaba cagado. ¡Te lo juro! Y el maldito nombre solo apareció en mi cabeza. Entonces comencé a pensar en 20 millones de cosas que rimaban con ello.
Eminem
El talento hace lo que quiere, el genio sólo lo que puede.
Eugène Delacroix
Un hombre representa siete años más al día siguiente del matrimonio.
Francis Bacon
Tú me diste el mejor regalo que me haya dado nadie, la desesperación.
Guy Pearce
Si piensas que tus usuarios son idiotas, sólo los idiotas lo usarán.
Linus Torvalds
Dímelo es el verbo, podemos hacerlo, pon el mundo en mis manos y solo hay que moverlo.
Mucho Muchacho
Es propia jurisdicción de la sabiduría el hablar, y privilegio de la cordura es el escuchar.
Oliver Wendell Holmes
Pretendía, al parecer, que su delito fuera considerado como crimen político, y a veces daba la impresión de no luchar para sí, sino para la organización jurídica. La táctica que el juez oponía era la de costumbre: ver en todas las acciones del asesino esfuerzos torpes y astutos para eximirse de responsabilidad.
Robert Musil
El concepto de infinito es la barrera que el hombre ha inventado, como idea, contra el cauce imperioso de los sentimientos, que siempre están contaminados de eternidad.
Salvador Elizondo
La televisión te corrompe la mente.
Shaquille O'Neal
La muerte no es el más grande de los males: es peor querer morir y no poder hacerlo.
Sófocles
El único instrumento que los hombres tenemos tanto para perfeccionarnos como para vivir dignamente es la educación.
Tomás de Aquino
Estoy de acuerdo en que las secciones de interés especial entre Portugal e Indonesia pueden continuar sin mí de ser liberado.
Xanana Gusmão
La soledad es un consuelo para un alma entristecida, que aborrece a los que la rodean igual que un ciervo herido abandona su rebaño, para refugiarse en una cueva en la que sonará o morirá
Yibrán Jalil Yibrán