Nunca he engañado a mi mujer. No es ningún mérito: la amo.
Georges Duhamel
La persona que no está interiormente preparada para la violencia es siempre más débil que el opresor.
Aleksandr Solzhenitsyn
Cada día esconde una nueva revelación o un nuevo descubrimiento que puedo obtener.
Bruce Lee
El arte sabe dar forma a la belleza, con toque imperceptible completando la vida, combinando impresiones, combinando los días.
Constantino Cavafis
Hagamos corajudamente el feo en literatura y matemos como sea la solemnidad.
Filippo Tommaso Marinetti
No he merecido la muerte porque no he cometido más falta que dar libertad a Costa Rica y procurar la paz de a la república.
Francisco Morazán
Ante todo, los artistas son los hombres que quieren llegar a ser humanos.
Guillaume Apollinaire
La verdadera locura quizá no sea otra cosa que la sabiduría misma que, cansada de descubrir las vergüenzas del mundo, ha tomado la inteligente resolución de volverse loca.
Heinrich Heine
Al hombre justo y tenaz en sus propósitos no le moverán de su firme voluntad ni la exaltación de los malos deseos de la multitud, ni el fiero rostro de un tirano amenazador.
Horacio
Avergonzado como un zorro capturado por una gallina.
Jean de La Fontaine
Nunca pretendí hacer historia, sino comprender mejor el amor y el poder, esas dos grandes pasiones de todos los tiempos.
José Luis Sampedro
Los músicos son terriblemente irrazonables. Siempre quieren que uno sea totalmente mudo en el preciso momento que uno desea ser completamente sordo.
Oscar Wilde
Porque las personas se fascinan con pinturas y palabras y terminan olvidando el Lenguaje del Mundo.
Paulo Coelho
El mayor desafío que se le presenta hoy por hoy y que se le presenta sistemáticamente a un escritor de ficción es la novela. Yo no sé bien de dónde procede eso, por qué esa exigencia y hasta qué punto la novela es la forma más justificable, porque hasta cierto punto tiene una categoría artística superior, aunque hay excepciones.
Rodolfo Walsh
La reconciliación es más bella que la victoria.
Violeta Chamorro
Todo es efímero como el arco iris.
Virginia Woolf