Es mejor malograr la propia juventud que no hacer nada en ella.
Georges Courteline
Pues no hay más remedio que matar el tiempo, y aun esto, si uno lo piensa, es el único empleo de la vida.
Anatole France
Si no fuera un hecho de experiencia que los valores supremos residen en el Alma, la Psicología no me interesaría en lo mas mínimo, ya que el Alma no sería entonces mas que un miserable vapor.
Carl Gustav Jung
Sé que me equivoqué, pero te amaré siempre.
Chris Noth
Disculpen que no me levante.
Groucho Marx
Notó la mirada de la chica pegada a él. Recobró la sangre fría. El agente secreto tomaba las riendas y su mente empezaba a trabajar con frialdad, buscando pistas, mentiras, dudas.
Ian Fleming
Es el porvenir quien debe imperar sobre el pretérito, y de él recibimos la orden para nuestra conducta frente a cuanto fue.
José Ortega y Gasset
Hablamos con indignación o entusiasmo; hablamos de opresión, de crueldad, de crimen, de devoción, de sacrificio, de virtud y nada sabemos de lo que hay realmente tras estas palabras. Nadie sabe lo que significa el sufrimiento o el sacrificio, excepto quizá las víctimas de la misteriosa intención de esas ilusiones.
Joseph Conrad
Como está bien educada, nunca tuvo voluntad propia.
Manuel Eduardo de Gorostiza
No hay nada más peligroso que no arriesgarse.
Pep Guardiola
Yo tengo la firme convicción de que la causa última de todos los males en el mundomoral y en el natural está en despertar la actividad intelectual.
Samuel Taylor Coleridge
La cultura descansa en una circuitería neuronal que realiza la proeza que llamamos "aprender".
Steven Pinker
Sin reglas todo es un caos.
Thomas Middleditch
El romper de una ola no puede explicar todo el mar.
Vladimir Nabokov
Amor por siempre, ese es el mensaje que quiero esparcir con mi arte.
Yayoi Kusama
Inicialmente, los enfermos creen conocer la causa de sus dolencias y justifican su visita al psiquiatra. Ellos se auto engañan a través de la valiente voluntad que les impulsa a venir. En la segunda visita ya se manifiesta el valor real de la voluntad y empiezan a entender la naturaleza incierta de esta.
Yukio Mishima