Que los únicos generales que se deben seguir a ciegas son los generales de los soldaditos de plomo.
Georges Brassens
Ni todo en tierras ni todo en casas, ni todo en barco, ni todo en arca.
Anónimo
La familia y los amigos íntimos me han dicho que no me presente. Los que me quieren han intentado disuadirme.
Florentino Pérez
O pienso que todo esto no se corresponde con mi personalidad. Yo no soy vanidoso. Y esto es un regalo para los vanidosos, que se vuelven locos con los agasajos. Yo lo veo como desde fuera. Lo veo fríamente. Lo he pasado bien y lo estoy pasando bien. Pero soy el mismo. El mismo que se ríe hasta de sí mismo.
Francisco Ayala
La infancia es ignorante; la mocedad, ligera de cascos; la juventud, temeraria, y la vejez, malhumorada.
Fray Luis de Granada
No le resta al hombre sino elegir con temor entre la felicidad sensual y una paz espiritual.
Friedrich Schiller
Si Dios es bueno, no es omnipotente; su poder queda limitado al bien, y si no es omnipotente o no es bueno, no es Dios.
Gleb Gusev
Es imposible refutar al ignorante en una discusión.
Immanuel Kant
Todo ser humano bueno, con conciencia social y sentido de la responsabilidad, deberá someterse a la autoridad constituida; obedecer a su doctor, a su Gobierno, a su psiquiatra, a su compañero; aunque sean un obstáculo a su comodidad y seguridad.
Isaac Asimov
Un hecho vale más que todo un mundo de promesas.
Jacob Howell
Mis canciones siempre han contenido temas frustrantes, relaciones que he tenido en mi vida.
Kurt Cobain
Cumple con gusto tu deber terrenal y llevarás bien a cabo tus propósitos divinos.
Mahabharata
No hay liberal mal puesto, como no hay avaro que no lo sea.
Miguel de Cervantes
¿Cómo ha podido llegar a albergarse una cosa absolutamente inmaterial (el alma) en una cosa absolutamente material (el cuerpo)? He aquí una de esas cuestiones que solo la fe, esa afirmación apasionada y estúpida de lo absurdo, puede resolver. Es el más grande de los milagros.
Mijaíl Bakunin
Nadie puede odiarte más intensamente que quien ha estado enamorado de ti.
Rick Riordan
Hay mosquitos - dijo ella de pronto, y se puso de pie y sacudió las faldas de su kimono. En la solitaria quietud del bosque ni uno ni el otro tenían algo que decir.
Yasunari Kawabata