Tal vez la única dignidad verdadera del hombre es su capacidad de despreciarse a sí mismo.
George Santayana
Tiene la mirada de Senna, de un talento que nace, no se hace.
Fernando Alonso
Lo que los ojos ven y los oídos oyen, la mente piensa.
Harry Houdini
Así suele ocurrir, Sam, cuando las cosas están en peligro: alguien tiene que renunciar a ellas, perderlas, para que otros las conserven.
J. R. R. Tolkien
Las presiones de ser padre son iguales a cualquier presión sobre la tierra. Ser un padre consciente, y tener que ver con la salud mental y física de un pequeño es una responsabilidad que la mayoría de nosotros, incluyéndome a mí, evita porque es demasiado duro.
John Lennon
La segunda vida de las flores es la mejor novela argentina que he leído en muchos años. Pacho O'Donnell.
Jorge Fernández Díaz
El matrimonio debe ser abierto a cualquier pareja de adultos que quieran entrar en ese contrato, sin fijarse en su orientación sexual. Es un asunto de igualdad de derechos civiles.
Judith Butler
La patria es un dolor que nuestros ojos no aprenden a llorar.
Leopoldo Marechal
Para un buen matrimonio hay que enamorarse muchas veces, siempre de la misma persona.
Mignon McLaughlin
Cuantos más pecados confieses, más libros venderás.
Ninon de Lenclos
La ciudad no tiene otro centro sino nosotros mismos.
Orhan Pamuk
¿Conoces esa mirada que tienen las mujeres cuando quieren sexo contigo? Yo tampoco.
Steve Martin
Maui siempre tiene tiempo para sus fans.
The Rock
La filosofía busca la verdad así como la vida humana busca el aire para ser. Pero el aire no tiene lugar ni dueño. Sin él no podemos vivir, y con él, no nos alcanza. Desde siempre la filosofía combina amor y conocimiento, y los dos flotando sobre un vacío.
Tomás Abraham
Solamente aquel que no deja detrás de sí una herencia de afectos sentirá escasa alegría en su sepulcro.
Ugo Foscolo
Una mano, que le pareció enorme, acababa de coger el asa y lo levantaba vigorosamente. Cosette, sin soltarlo, alzó la cabeza y vio una gran forma negra, derecha y alta, que caminaba a su lado en la oscuridad. Era un hombre que había llegado detrás de ella sin que lo viera. Hay instintos para todos los encuentros de la vida. La niña no tuvo miedo.
Victor Hugo