La caridad degrada al que la recibe y endurece al que la entrega.
George Sand
Un novio es un hombre feliz que está pronto a dejar de serlo.
Enrique Jardiel Poncela
Tratar de controlar nuestras propias reacciones sin conseguirlo es el guion que conduce a la esclavitud del miedo.
Giorgio Nardone
No sólo lo congénito, sino también lo adquirido forma al hombre.
Goethe
Hasta nuestras leyes, que son pedantes e insensibles, se dejan conmover y detienen la espada de la justicia.
No existe en la historia humana memoria de un filósofo dichoso.
H. L. Mencken
El diluvio universal fué un fracaso: quedó una familia viva.
Henry Becque
Nunca nos faltadinero para nuestros caprichos: sólo regateamos el precio de las cosas útiles o necesarias.
Honoré de Balzac
Así, las 255 fortunas privadas más importantes del mundo suman, en conjunto, un billón de dólares, que equivale a la renta anual acumulada de los 2.500 millones de personas más pobres del planeta, es decir, el 40% de la población mundial.
Jean Ziegler
La masonería es una sociedad secreta, no una secta. La forman hombres selectos que buscan iluminación y el triunfo de la moral en el mundo.
Juan Gómez-Jurado
Todas las familias felices se parecen unas a otras; pero cada familia infeliz tiene un motivo especial para sentirse desgraciada.
León Tolstói
En los negocios de la vida no es la fe lo que salva, sino la desconfianza.
Marlene Dietrich
Se puede conceder un cierto privilegio moral a la aristocracia a expensas de la burguesía, pues la primera reconoce sincera y abiertamente la desigualdad, considerándose una raza superior y privilegiada, mientras la segunda disimula su situación de favorecida.
Nikolái Berdiáyev
Periodista: ¿Quien es el mejor guitarrista argentino?
Pappo
Mi padre era lo suficientemente inteligente para alentar a sus hijos a que encontraran su propio genio y sus propias maneras de aprender. Él sabía que cada uno de sus hijos era diferente, que tenían genios diferentes y que aprendían de manera diferente... Aunque todos proveníamos de los mismos padres.
Robert Kiyosaki
A medida que la vida interior de los prisioneros se hacía más intensa, sentíamos también la belleza del arte y la naturaleza como nunca hasta entonces. Bajo su influencia llegábamos a olvidarnos de nuestras terribles circunstancias.
Viktor Frankl