El verdadero modo de no saber nada es aprenderlo todo a la vez.
George Sand
El hastío es la enfermedad propia de la gente dichosa; el desgraciado no se aburre nunca, tiene demasiadas cosas que hacer.
Abel Dufresne
Una nación permanece fuerte mientras se preocupa de sus problemas reales, y comienza su decadencia cuando puede ocuparse de los detalles accesorios.
Arnold J. Toynbee
Amo la casa en la cual no veo nada superfluo y encuentro todo lo necesario.
Benjamin Franklin
Esta revolución se propone arrancar de raíz las injusticias.
Che Guevara
La amistad comienza donde termina o cuando concluye el interés.
Cicerón
En la América de hoy... tenemos a Woody Allen, cuyo humor se ha vuelto tan sofisticado que sólo lo entiende Mia Farrow. Los que crean que Mia Farrow debería volver a hacer películas donde el demonio la deja preñada y Woody Allen debería volver a disfrazarse de espermatozoide, que levanten la mano. Gracias.
Dave Barry
Una literatura llamada a durar es generalmente profética; más raramente, apologética menos todavía de propaganda.
Eduardo Mallea
Si los indios no fueran al mismo tiempo los pobres nadie usaría esa palabra a modo de insulto.
José Emilio Pacheco
Siempre salgo con mi mujer de la mano. Es que si la suelto se va de compras.
Juan Verdaguer
Puedes sentir que respirar o que no, estar vivo y estar muerto al mismo tiempo. Morir antes de hacerlo. Desperdiciar el tiempo. La muerte también abarca muchos estados vivos y latentes, pero la libertad no es uno de ellos.
Leonor Antón
La ingratitud de una hija es más punzante que el diente de un reptil -afirmó-. Pero el amor puede doblegar al espíritu más altivo.
Neil Gaiman
Una rosa de un rojo tan intenso que mancha el alma como el vino.
Paul Claudel
Pienso que es muy hermoso que los pobres acepten su destino, que lo compartan con la pasión de Cristo. Pienso que el sufrimiento de los pobres es de gran ayuda para el mundo.
Teresa de Calcuta
Si deseas saborear tu virtud, peca de vez en cuando.
Ugo Ojetti
En cada moda hay algo de amarga sátira respecto del amor, y en ella se emplazan, sin piedad, todas las perversiones sexuales.
Walter Benjamin