Frase de George R. R. Martin

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Si le cortas la lengua a un hombre, no demuestras que estuviera mintiendo: demuestras que no quieres que el mundo oiga lo que pu... - George R. R. Martin

Si le cortas la lengua a un hombre, no demuestras que estuviera mintiendo: demuestras que no quieres que el mundo oiga lo que pueda decir.

George R. R. Martin

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Explorar Frases

La cara no es jamás opaca del todo; el alma se muestra a través de sus muros.

Aldous Huxley

Alain, vuelve, te echo de menos.

Ayrton Senna

La mayor ventaja de la compañía es la de hacernos apreciar el valor de la soledad.

Charles Chincholle

Las brujas odian a los niños.

Chris Rock

Para ti seré aquel que hoy lo pierde todo porque no supo escucharte. Que para mí sólo seré un extraño en paz que nunca te dejó de amar.

Fernando Delgadillo

Si Messi se pone a tiro, seguro que lo fichamos. Es un gran jugador.

Florentino Pérez

Nuestras propias cualidades nos hacen menos ridículos que aquellas que afectamos.

François de La Rochefoucauld

Sé que se enamoraron como dos locos, pero no pudieron formar una familia. ¿Por qué? Porque venían de mundos opuestos. Él era de Miraflores y ella de La Victoria, y en la Lima de ese entonces la distancia social entre ambos era insalvable. Solo cuando llegó el otoño de su vida, con la salud resquebrajada, mi padre se instaló definitivamente en la casa.

Gisela Valcárcel

La felicidad no existe en la vida. Sólo existen momentos felices.

Jacinto Benavente

Somos de la misma sustancia que los sueños, y nuestra brevevida culmina en un dormir.

John Irving

Cada uno está en el lugar en el que se ha colocado a sí mismo.

Juan José Millás

... para mantener el estado se debe tener un ejército propio, el consenso del pueblo y virtud en el príncipe...

Nicolás Maquiavelo

Desde que te vi supe que eras tú.

Paloma Bloyd

La lectura de todo buen libro es como una conversación con los hombres que lo han escrito, los más dignos de las edades pasadas; una conversación selecta, en la cual no nos descubren sino sus mejores pensamientos.

René Descartes

¡Dios mío! ¿Qué es el hombre? A pesar de su aparente simplicidad, tratad de desarrollar sus diestros y sus siniestros, sus honduras y sus superficialidades, sus bondades y sus maldades; todo ello forma un embrollo tal que debe confundir al mismo diablo.

Robert Burns