Si un hombre hace todo lo que puede, ¿qué más se le puede pedir?
George Patton
En efecto, todo el espiritismo está contenido en la existencia del alma y en su estado después de la muerte.
Allan Kardec
Kant ha utilizado el término Dialéctica en un sentido menos favorable de la palabra, algo parecido a arte de disputar con sofismas.
Arthur Schopenhauer
El sol puede morir y volver a nacer; pero nosotros una vez apagada nuestra breve claridad, hemos de dormir una sola y eterna noche.
Catulo
Engaña para ganar.
Eddie Guerrero
El sacrificio propio nos deja en disposición de sacrificar a los demás sin sonrojarnos.
George Bernard Shaw
Un emprendedor no puede limitarse a jugar sobre seguro. Su mentalidad tiene que ser, necesariamente, la de asumir un gran riesgo. Si teme que, en un determinado momento, se le vaya a estigmatizar por un fallo, estará cometiendo una equivocación dramática.
Howard Schultz
No hay sitio en mi memoria donde encuentre tu vida más que tus ya distantes huellas deshabitadas. Pues en mi sueño en vano tu rostro se refugia y huye tu voz del aire real que la devora.
Jorge Cuesta
La soledad es como el apetito: no te das cuenta de lo hambriento que estás hasta que empiezas a comer.
Joyce Carol Oates
Sólo quedó una vía para salvar nuestra libertad política, nuestra libertad personal, nuestra seguridad, nuestra forma de vida, desarrollada desde hacía muchos siglos, y que tenía como base un concepto cristiano y humano del mundo: una firme conexión con los pueblos y países que tengan las mismas opiniones que nosotros sobre estado, persona, libertad y propiedad.
Konrad Adenauer
Cada persona que vence en cualquier empresa debe estar dispuesta a quemar sus naves y eliminar todas las posibilidades de dar marcha atrás. Sólo así puede tener la seguridad de mantener ese estado mental conocido como deseo ardiente de ganar, esencial para el éxito.
Napoleon Hill
No más partidos, no más autoridad, libertad absoluta del hombre y del ciudadano: esta es mi profesión de fe social y política.
Pierre Joseph Proudhon
Hay dos emociones que siempre controlan la vida de la gente: el miedo y la codicia. Si le ofreces más dinero, continuará por siempre en ese ciclo y gastará más cada vez. Es a lo que le llamo la Carrera de la Rata.
Robert Kiyosaki
Y aquel arrojarme a la tierra, aquel gritar alto el nombre en el silencio, era dulzura de sentirme vivo.
Salvatore Quasimodo
Yo no sé mucho de casi nada.
Tom Hanks
Condenando el parasitismo de la Nobleza inglesa y la naciente clase capitalista, Moro describió a los propietarios de profesion, como los zánganos, viven del trabajo ajeno, concretamente del trabajo vivo de los inquilinos, a los que mondan hasta la carne viva.
Tomás Moro