La indignación moral no es más que envidia con aureola.
George Herbert
Y de veras que nunca sabes lo pomposo que va a resultar algo hasta que lo ves impreso.
Alisa Kwitney
¿Cómo podría ese tanto que se llama a sí mismo yo, atreverse a comprender su innumerable quién?
E. E. Cummings
El amor prolongado es posible -aun siendo un amor feliz- porque no es fácil poseer a un ser humano hasta el final, conquistarlo hasta el final -siempre se abren fondos nuevos, cuartos traseros del alma nuevos, aún no descubiertos, y también hacia ellos alarga sus manos la infinita ansia posesiva del amor-. Pero el amor finaliza tan pronto como sentimos un ser como limitado.
Friedrich Nietzsche
La cólera de los imbéciles devasta hoy la tierra.
Georges Bernanos
La primera y más respetable de las artes es la agricultura.
Jean-Jacques Rousseau
Todo castigo es dañino. Todo castigo en sí es perjudicial.
Jeremy Bentham
No me llegas ni a la altura de las pezuñas.
John Goodman
La codicia trae consigo voluntad determinada de hacer el mal.
Juan de Mariana
El sistema socialista reemplazará con el tiempo al sistema capitalista... tarde o temprano tendrá lugar la revolución e inevitablemente triunfará.
Mao Zedong
El arte parece ser el empeño por descifrar o perseguir la huella dejada por una forma perdida de existencia.
María Zambrano
Únete a los que jamás dijeron: se acabó, aquí me detengo. Porque así como al invierno le sigue la primavera, nada termina: después de alcanzar tu objetivo hay que comenzar de nuevo, empleando en todo momento lo que aprendiste en el camino.
Paulo Coelho
Me coge de la mano y yo me sueño con su pelo, para estar tan colgado hace falta echarle güevos.
Roberto Iniesta
A ojos de los chicos, el tanga reduce a las niñas a su parte posterior.
Ségolène Royal
Nada importa morir, pero no vivir es horrible.
Victor Hugo
No soy más que una pequeña parte de una gran masa de carne humana de una masa encerrada tras la alambrada de espinas, agolpada en unos cuantos barracones de tierra. Una masa de la cual día tras día va descomponiéndose un porcentaje porque ya no tiene vida.
Viktor Frankl