En todas partes, una mirada es una forma de lenguaje.
George Herbert
El conocimiento humano se basa en dos palabras: Confiar y esperar.
Alejandro Dumas
Nuestra gestión gubernamental responderá a las prioridades del interés nacional sin subordinación alguna frente a los grupos de presión, que tradicionalmente han empleado su poder para obtener o preservar privilegios contrarios al bien común.
Álvaro Arzú Irigoyen
El de la locura y el de la cordura son dos países limítrofes, de fronteras tan imperceptibles, que nunca puedes saber con seguridad si te encuentras en el territorio de la una o en el territorio de la otra.
Arturo Graf
La razón se le ha dado al hombre para hacerle reconocer que no sirve para nada.
Erich Maria Remarque
Cuando yo cocino mi mente se bloquea, solo añoro ver mi obra acabada, por eso no tengo lugar a ningún pensamiento.
Ferran Adrià
Era un hotel triste. Triste como un perro negro de tres patas empapado por la lluvia de diciembre.
Haruki Murakami
Yo creo que los Gobernadores Civiles deben existir.
José María Aznar
Y mirá que apenas nos conocíamos y ya la vida urdía lo necesario para desencontrarnos minuciosamente. Como no sabías disimular me di cuenta en seguida de que para verte como yo quería era necesarioempezar por cerrar los ojos.
Julio Cortázar
Todavía no estamos metidos en una guerra civil pero andamos muy cerca de ella.
Mahatma Gandhi
Cada vez que ganamos nos tienen en vilo, porque se creen los inventores del remo y al perder la bandera de La Concha actúan como si les arrebataran el Árbol de Guernica dan ganas de decirles que remen ellos.
Miguel Ángel Revilla
No creo que el voto de Saramago valga lo mismo que el de un traficante.
Pedro Ruiz
Perro ladrador, poco mordedor.
Proverbio
El que naufraga por segunda vez acusa injustamente a Neptuno.
Publilio Siro
Tu pelo es fuego de invierno, rescoldo de enero. Allí arde también mi corazón.
Stephen King
¿Por qué está este hombre en la Casa Blanca? La mayoría de estadounidenses no votaron por él ¿Por qué está él ahí? Y yo os digo esta mañana que él está en la Casa Blanca porque Dios lo puso allí para un tiempo como este.
William G. Boykin