La volubilidad de la mujer a quien amo es sólo comparable a la infernal constancia de las mujeres que me aman.
George Bernard Shaw
Todas las fronteras son convenciones que esperan ser superadas.
Ben Whishaw
La calumnia deja siempre en peor lugar al calumniador; nunca al calumniado.
Charles Caleb Colton
La creatividad es más que ser simplemente diferente. Cualquiera puede hacer extravagancias, eso es fácil. Lo difícil es ser tan simple como Bach.
Charles Mingus
Inky dice: la nueva forma de estar presente es estar ausente.
Chuck Palahniuk
Un hombre hedonista, permisivo, consumista y relativista, no tiene referentes ni puntos de apoyo, y acaba no sabiendo a dónde va, envilecido, rebajado... Convertido en un objeto que va y viene, que se mueve en todas las direcciones, pero sin saber adónde se dirige. Un hombre que en vez de ser brújula, es veleta.
Enrique Rojas
Límite de la grandeza de los placeres es la eliminación de todo dolor. Donde exista placer, por el tiempo que dure, no hay ni dolor ni pena ni la mezcla de ambos.
Epicuro
Una lucha que moviliza todas las capas del pueblo, que expresa las intenciones y las impaciencias del pueblo, que no teme apoyarse casi exclusivamente en ese pueblo, es necesariamente victoriosa.
Frantz Fanon
A ti no te conozco, pero tú estás en mí porque me vas buscando.
Gonzalo Rojas
El temor es a menudo una indicación de que huyo de mí.
Hugh Prather
La mayoría de los hombres hacen el viaje de la vida como si fueran portadores de unas órdenes secretas y selladas de las que no pudieran enterarse hasta que se hallaren en medio del océano.
James Russell Lowell
Para entender lo que es la recursividad, hay que entender primero lo que es la recursividad.
Javier Checa
España es muy grande, y hay que trabajar en muchos sitios. Entonces no vamos todos juntos, todos a la vez...
Magdalena Álvarez
El que se sienta relajado porque ganamos la Copa Libertadores está muy equivocado.
Martín Palermo
No se puede perder lo que no se tiene.
Pablo Palazuelo
Todo hombre es una divinidad disfrazada, un dios haciéndose el tonto.
Ralph Waldo Emerson