Las escuelas que enseñan música te enseñan a usar los ojos para que reconozcas las notas. Pero esa es sólo una parte de la historia, porque los oídos son la parte más importante. Cuando la música sale, cuando la escuchas, va para los oídos. Así que es mejor enseñar primero a tus oídos cómo funciona la música y luego a tus ojos.