El 49% de los matrimonios terminan en divorcio. ¿Saben por qué? Porque el 51% de los hombres entran en razón.
Gene Simmons
No es fácil encontrar la felicidad en nosotros, pero es imposible encontrarla en ningún otro lugar.
Agnes Repplier
Ya veía en la vanguardia una escapatoria fácil, una evasión de los problemas reales, la palabra teatro absurdo me irritaba. La vida no era absurda, sino difícil, muy difícil solamente. No había nada que no requiriera unos esfuerzos inmensos, desproporcionados.
Arthur Adamov
Lo último que se sabe cuando se realiza un trabajo es por dónde empezar.
Blaise Pascal
Que yo te mostraré lugares que nadie conoce y, si tú quieres, las perfectas regiones del Sueño.
E. E. Cummings
Es maravilloso comenzar el día sabiendo que vas a dar una alegría a un alma en pena.
Evelyn Waugh
Merced al progreso de las religiones modernas la eternidad es cada día más larga.
Fernando Arrabal
¡¿Qué es esto... Grapa?!
Gustavo Cerati
La negación sólo es útil y noble y piadosa cuando sirve de tránsito a una nueva afirmacón.
José Ortega y Gasset
La filosofía es la ciencia que complica las cosas que todo el mundo sabe.
Juan Benet
Yo he visto malos que se han vuelto buenos, pero no he visto jamás un bruto volverse inteligente.
Juan Domingo Perón
El gran descubrimiento de Darwin, el principio universal de la selección natural, está firme y definitivamente establecido como la única vía de cambios evolutivos importantes.
Julian Huxley
¿Hay misterio que celebrar? Pues comamos, dice el hombre; no dice: reflexionemos. El vientre es el encargado de cumplir con las grandes solemnidades.
Mariano José de Larra
Para la mayoría de nosotros, la vida verdadera es la vida que no llevamos.
Oscar Wilde
El cerebro no es del todo como un ordenador sino más bien como un ordenador que está cambiando contínuamente.
Roger Penrose
Pero la verdad era que había orden en todas partes, en los museos, en las estaciones de ferrocarril y también en las casas de la gente, menos en las almas: en las almas alemanas había una penumbra impenetrable, una bruma infantil, la espesa bruma de unos mitos sangrientos, vengativos e inconfesables.
Sándor Márai