Hasta Dios se va de vacaciones en agosto.
Gabriel García Márquez
Los Acuerdos de Paz son nuestro legado a las nuevas generaciones. Los ponemos en manos del pueblo de Guatemala para que los levanten como bandera de lucha a favor del bien común, la conciliación nacional, la democracia y la paz.
Álvaro Arzú Irigoyen
Lo profundo, lo más profundo, lo encontré en el fondo de tus ojos.
Antonio Porchia
Tome sus placeres seriamente.
Charles Eames
Un cielo especular es todo lo que se ve del agua invisible que lo refleja.
Enrique Lihn
Convendría que los mortales procreasen hijos por otros medios, y que no hubiese mujeres, así se verían libres de todo mal.
Eurípides
Desechad tristezas y melancolías. La vida es amable, tiene pocos días y tan sólo ahora la hemos de gozar.
Federico García Lorca
Es un necio quien pudiendo decir una cosa en diez palabras emplea veinte.
Giosuè Carducci
Conocemos más los libros que las cosas, y el ser sabio consiste en saber cosas y no libros.
Jaime Balmes
Cuidado que nadie los extravíe; porque muchos vendrán sobre la base de mi nombre, diciendo: 'Yo soy el Cristo', y extraviarán a muchos. Ustedes van a oír de guerras e informes de guerras; vean que no se aterroricen. Porque estas cosas tienen que suceder, más todavía no es el fin.
Jesús de Nazaret
Cuanto más sola está una persona, más solitaria se vuelve. La soledad va creciendo a su alrededor, como el moho. Un escudo que inhibe aquello que podría destruirla, y que tanto desea. La soledad es acumulativa, se extiende y se perpetúa por sí sola. Una vez que ese moho se incrusta, cuesta una vida arrancarlo.
Juan Gómez-Jurado
La verdad siempre sale a flote como la gota de aceite en el vaso de agua.
Lola Flores
Incluso los locos queremos que nos consulten.
Nicole Kidman
Año tras año, mujeres de veintitantos años vienen a Nueva York en busca de las dos M: moda y matrimonio.
Sarah Jessica Parker
Nada en el mundo puede quitarnos el poder de decir yo. Nada, salvo la desgracia extrema. Nada hay peor que la extrema desgracia que desde fuera destruye el yo, puesto que luego resulta ya imposible destruírselo uno mismo. ¿Qué les ocurre a aquéllos cuyo yo ha sido destruido desde fuera por la desgracia?
Simone Weil
La virtud no es hereditaria.
Thomas Jefferson