Un político divide a las personas en dos grupos: en primer lugar, instrumentos; en segundo, enemigos.
Friedrich Nietzsche
Los ideales son pacíficos, la historia es violenta.
Brad Pitt
En determinadas circunstancias, la ortodoxia es apenas el rostro deformado de la parálisis intelectual.
Eduardo Angeloz
La alienación intelectual es una creación de la sociedad burguesa. Yo llamo sociedad burguesa a toda sociedad que se esclerotiza en unas formas determinadas, prohibiendo toda evolución, toda marcha, todo progreso y todo descubrimiento.
Frantz Fanon
Cada uno de nosotros nace en una atmósfera de ideas y de creencias, formada por toda la humanidad anterior; cada uno de nosotros lleva, sin saberlo, un elemento más o menos importante para la vida de la humanidad sucesiva.
Giuseppe Mazzini
Hay en el objeto algo de ley ignorada que corresponde a la ley ignorada en el sujeto.
Goethe
Luchamos porque estamos demasiado estrechamente atados, porque vivimos en condiciones de esclavitud económica y de ambición moral. Hasta tanto no sea aflojadas nuestras ligaduras, no podrán triunfar finalmente el deseo de creación sobre el deseo de destrucción. Debemos estar en paz con nosotros mismos antes de poder estar en paz con nuestro prójimo.
Herbert Read
El manantial desaprueba casi siempre el itinerario del río.
Jean Cocteau
La constitución es un pedazo de papel.
Joaquín Balaguer
Lo que más vale en el hombre es su capacidad de insatisfacción.
José Ortega y Gasset
Mas al espíritu grandioso suele calmarle la victoria; y la moderación es un goce para él y yo entiendo además que el que lo quiere y lo procura puede mejorar de día en día.
Juan Montalvo
Escuché una vez, a un viejo decir en un bar, que el hombre, con el tiempo, se acostumbra a todo.
Mario Casas
Se amaban con ternura, pasión, fidelidad. Trataban de estar siempre juntos y cuando tenían que separarse por cualquier motivo, durante ese tiempo tanto pensaban el uno en el otro que la separación era otra suerte de convivencia, más sutil, más sagaz, más ávida.
Silvina Ocampo
La oración es el mejor regalo de amor que le puedes dar a todo el que amas.
Teresa de Calcuta
Porque los veloces dragones de la noche hienden vertiginosamente las nubes, y brilla lejos el heraldo de la Aurora; a cuya proximidad los espíritus, errabundos de acá para allá, se refugian en tropel en los cementerios.
William Shakespeare
Esta primavera las aves han vuelto demasiado pronto. Alégrate, razón, el instinto también yerra. Se emboba, se despista.
Wislawa Szymborska