Artículo primero. - Viciosa es toda especie de contranaturaleza. La especie más viciosa de hombre es el sacerdote: él enseña la contranaturaleza. Contra el sacerdote no se tienen razones, se tiene presidio.
Después de la tormenta siempre llega la calma, pero sé que después de ti, después de ti no hay nada.
Hago más caso del testimonio de mi conciencia que de todos los juicios que los hombres hagan por mí.