El individuo ha luchado siempre para no ser absorbido por la tribu. Si lo intentas, a menudo estarás solo, y a veces asustado. Pero ningún precio es demasiado alto por el privilegio de ser uno mismo.
Friedrich Nietzsche
La ciencia siempre se ha preciado de ser empírica y creer solamente aquello que pudiera verificarse.
Bertrand Russell
Obtendremos de la vida el resultado de lo que somos.
Blanca Miosi
Cuando el sacrificio se convierte en un deber y en una necesidad para el hombre, ya no hallo límite al horizonte que ante mí se abre.
Ernest Renan
Nunca traiciones la amistad sincera, pues si lo hicieras, tarde o temprano del cielo llegará el castigo.
Esopo
Me dan ganas de dejar el tenis, cada vez que juego me lleno de frustraciones y por más que entreno y entreno, las cosas no me salen y pienso que no me van a salir nunca más.
Gastón Gaudio
Los proverbios son los ecos de la experiencia de un pueblo y corresponden al pensamiento íntimo de cada uno.
Gustave Le Bon
Deja tu afición a las primeras piedras y pon la última en uno solo de tus proyectos.
Josemaría Escrivá de Balaguer
Amor es voluntad dulce y sabrosa, que todo corazón duro enternece: el amor es el alma en toda cosa, por quien remoza el mundo y reverdece.
Juan Boscán
Como el agua gasta lentamente la piedra, así el tiempo gasta los corazones.
Mika Waltari
Cuando alguien habla de lo rápido que olvidan los niños, lo rápido que perdonan, lo sensibles que son, dejo que me entre por un oído y me salga por el otro. Los niños son capaces de recordar, de sentir rencor y guardárselo y tratar a las personas que no les gustan con extrema frialdad.
Peter Hoeg
Los semejantes se atraen. Limítate a ser quien eres: sereno, transparente y brillante. Cuando irradiamos lo que somos, cuando sólo hacemos lo que deseamos hacer, esto aparta automáticamente a quienes sí tienen algo que aprender y también algo que enseñarnos.
Richard Bach
El mostrador de un funcionario es lo más cerca que estaremos de la eternidad en vida.
Ronald Reagan
Me hago la autopsia a mí mismo. Sin piedad. Me tumbo en la mesa del quirófano y examino todos mis sentimientos y mis recuerdos con la esperanza de que la culpa sea también mía, de que me haya equivocado, de que no haya amado a Anna, de que no la haya amado lo suficiente, de que no haya sido lo bastante hábil o astuto... Porque quizá necesitemos también astucia para el amor.
Sándor Márai
Ninguna raza de reyes ha presentado un hombre de sentido común en veinte generaciones.
Thomas Jefferson
Los hombres que no perdonan a las mujeres sus pequeños defectos jamás disfrutarán de sus grandes virtudes.
Yibrán Jalil Yibrán