Como los servicios que el Estado nos presta son una imposición, los servicios que nos exige en pago también son una imposición, y muy apropiadamente se les llama impuestos.
Frédéric Bastiat
No sólo de palabras vive el hombre, pese a que en alguna ocasión tenga que comérselas.
Adlai Ewing Stevenson
Para mí he dejado lo mejor ̈La esperanza ̈
Alejandro Magno
He estado escapando durante tanto tiempo que no sé cómo parar.
Blake Lively
En la paz, los hijos entierran a los padres; la guerra altera el orden de la naturaleza y hace que los padres entierren a sus hijos.
Heródoto
Dios castiga en los hijos las culpas de los padres, porque sabe que no hay mayor dolor para los padres que el dolor de los hijos.
Jacinto Benavente
Los hijos se convierten para los padres, según la educación que reciban, en una recompensa o en un castigo.
Jean Petit Senn-Antoine
La falta de recursos no es una debilidad, sino una exigencia que debe obligar a ser innovador, creativo y recursivo.
Jorge González Moore
Para mí, el escribir era vivirse, conocerse, ser arqueólogo de uno mismo. Escarbar y, si se escarba, hay de todo dentro de nosotros: el criminal y el santo, el héroe y el cobarde.
José Luis Sampedro
Todo acto de creación es un acto de amor.
José Revueltas
La vocación cristiana consiste en hacer endecasílabos de la prosa de cada día.
Josemaría Escrivá de Balaguer
... se despide este que os habla, vuestro amigo y compañero Juan Antonio Cebrián.
Juan Antonio Cebrián
Cuando se está enamorada, la fidelidad es fácil.
Julia Roberts
El futuro es de aquellos que saben a donde pertenecen.
Kate Winslet
Si por casualidad hay que, aún siendo ignorantes de todas las matemáticas, presumiendo de un juicio sobre ellas por algún pasaje de las escrituras, malignamente distorsionado de su sentido, se atrevieran a rechazar y atacar esta estructuración mía, no hago en absoluto caso de ellos, hasta el punto de que condenaré su juicio como temerario.
Nicolás Copérnico
Para ser hermosa, lo que una mujer necesita es un suéter negro, unas faldas negras y caminar del brazo de un hombre que ame.
Yves Saint Laurent