¿Sería posible que este mundo nos diera alegría si no estuviéramos refugiados en él?
Franz Kafka
No existen deberes innobles.
Alessandro Manzoni
Soy música. No estoy tratando de ser diplomática, ya sabes, tratando de conseguir mis 15 minutos. Sólo soy una música honesta.
Amy Winehouse
Yo, para gobernar, no necesito más que luz y taquígrafos.
Antonio Maura
En India y China hará falta una década antes de que lleguemos a ese nivel.
Bill Gates
¿Para qué es oro el tiempo más que para verlo pasar acariciándolo?
Camilo José Cela
El amor es un crimen que no puede realizarse sin cómplice.
Charles Baudelaire
No quiero entrar en polémicas. Si hablo lo que pienso siempre, me mataban.
Cristiano Ronaldo
Era lo último que iba quedando de un pasado cuyo aniquilamiento no se consumaba, porque seguía aniquilándose indefinidamente, consumiéndose dentro de sí mismo, acabándose a cada minuto pero sin acabar de acabarse jamás.
Gabriel García Márquez
Las novelas que prefiero -dice- son las que comunican una sensación de malestar desde la primera página.
Italo Calvino
Otras formas de vida, además de la nuestra, merecen nuestra consideración. El hombre debería ser agricultor, no explotador. Este planeta no está destinado exclusivamente a nuestro porvecho. El destruir todas las formas de vida que no tienen para nosotros utilidad ostensible y directa es inmoral y, en definitiva, es muy posible que contribuya a nuestra propia destrucción.
John Seymour
Con la consagración de Pipino, la Iglesia instituyó el derecho divino de los reyes (versión cristiana de la deificación de los césares pagana), esa pamema que unirá indisolublemente Altar y Trono, o sea clero y aristocracia, a lo largo de los siglos, en la tarea de pastorear (y ordeñar) a los pueblos.
Juan Eslava Galán
La adolescencia es la única época en la que he aprendido algo.
Marcel Proust
Las acciones -no los pensamientos ni las intenciones- son la verdadera forma de juzgar a los demás.
Nicholas Sparks
Cuando las voces suaves mueren, Su música vibra aún en la memoria.
Percy Bysshe Shelley
Las pasiones del amor, del orgullo y de la cólera, las pasionesnobles y sagradas que animaron a los dioses antiguos, se hacen esclavas de la razón.
Ramón María del Valle-Inclán