Si no nos aduláramos jamás mutuamente, la vida sería menos placentera.
François de La Rochefoucauld
Me pinto el cabello de negro para los encuentros amorosos, y de blanco para las reuniones de negocios.
Aristóteles Onassis
Busco en los hombres aquel amor de la patria que hallo tan celebrado en los libros; quiero decir aquel amor justo, debido, noble, virtuoso, y no le encuentro. En unos no veo algún afecto a la patria; en otros sólo veo un afecto delincuente, que con voz vulgarizada se llama pasión nacional.
Benito Jerónimo Feijoó
La naturaleza ha colocado al género humano bajo el gobierno de dos maestros soberanos, el dolor y el placer. Solo por ello establecemos lo que debemos hacer y determinamos lo que vamos a hacer.
Daniel Kahneman
Soy un defensor de la vida. Pero no la que está por venir, sino la que está ahora en la Tierra.
Fernando Vallejo
Que el alimento sea tu mejor medicina y tu mejor medicina sea tu alimento.
Hipócrates
Contigo, Jesús, ¡qué placentero es el dolor y qué luminosa la oscuridad!
Josemaría Escrivá de Balaguer
Se limitan a pontificar y adoptar poses. Nadie experimenta. Nadie realiza investigación de campo. Nadie se atreve a resolver los problemas, porque la solución podría contradecir la propia filosofía, y para la mayoría de la gente aferrarse a sus creencias es más importante que conseguir algo en el mundo.
Michael Crichton
Con maderas de recuerdos armamos las esperanzas.
Miguel de Unamuno
La Realidad es aquello que, incluso aunque dejes de creer en ello, sigue existiendo y no desaparece.
Philip K. Dick
El escultor no hace más que llamar, con el cincel y a golpe de martillo, a los guerreros que duermen en las espesuras del mármol.
Roberto Obregón
Me gusta pensar que cuando me equivoco no soy completamente yo, sino más bien ese animal no pensante que hay en mí. Así se puede ser más permisivo con uno mismo.
Shakira
Para hacerse oír, a veces hay que cerrar la boca.
Stanisław Lem
Indudablemente nadie se ocupa de quien no se ocupa de nadie.
Thomas Jefferson
No vaya a ir demasiado lejos en el culto a la muerte, demasiado lejos en la devoción por un hecho tan sencillo, sin el cual, por otra parte, no habría arquitectura, ni pintura, ni escultura, ni música, ni siquiera poesía.
Thomas Mann
El hombre es el mejor equipo que podemos poner a bordo de una nave espacial.
Wernher von Braun