Pocos son los que conocen la muerte; es algo que no suele aceptarse por decisión propia, sino por estolidez y por costumbre, y la mayoría de los hombres mueren porque no hay remedio para la muerte.
François de La Rochefoucauld
No odio a nadie, me parece que es una pérdida de tiempo y desgasta muchísimo.
Alejandro Sanz
El rey que lucha contra su pueblo, lucha contra sí mismo.
Alfred Tennyson
-Lo que yo quiero -decía don Nicolás a su sobrino Pedrito, que hacía unos versos muy finos y estudiaba Filosofía y letras- es una cachonda con arrobas que me haga gozar, ¿me entiendes?, una tía que este apretada que tenga a donde agarrarse. Todo lo demás son monsergas y juegos florales.
Camilo José Cela
No considero libre a quien no tiene algunas veces sus ratos de ocio.
Cicerón
Las acciones dicen más que las palabras, y una sonrisa expresa: Me gusta usted. Me causa felicidad. Me alegro tanto de verlo.
Dale Carnegie
Cómo retomas el hijo de una vida vieja, cómo continuas, cuando en tu corazón empiezas a entender que no hay manera de regresar. Hay ciertas cosas que el tiempo no puede curar. Algunos dolores demasiado profundos que se han arraigado.
Elijah Wood
Las autonomías han creado 17 nuevos centralismos y en pocos años, el Estado español puede limitarse a administrar el Museo del Prado.
Francisco Vázquez Vázquez
Sufren mucho en la vida quienes hacen de escudo, y los vigilantes, con su oído y su ojo siempre despiertos.
Javier Marías
Casi siempre que se descubre algo, lo primero que se ve es que ha podido descubrirse antes.
José Selgas
Jesús solo fundó su imperio en el amor; y hasta hoy muchas personas morirían por Él.
Marlene Dietrich
Todas las mujeres deberían tener catorce años.
Nelson Rodrigues
Hoy me has desterrado del prado y vivo en desierto.
Rapsusklei
Quien a hierro mata, a hierro muere.
San Mateo
Le pareció que él siempre había sido considerado con la gente. En realidad, por lo general le importaba más lo que pudieran pensar de él los demás, que lo que pensaba él de sí mismo. Era la opinión de los demás acerca de él lo que más le preocupaba. Ahora comprendía que lo importante no era lo que los demás pensaran de él, sino lo que pensaran de sí mismos.
Spencer Johnson
Se tiende a honrar a quien ha dedicado toda su vida a una única empresa, lo cual es justo, pero quien quema toda su vida en un fuego de artificio, que dura un instante, testimonia con mayor precisión y pureza los valores auténticos de la vida humana.
Yukio Mishima