El ser humano que pierde la lealtad pierde la vida.
Francisco Garzón Céspedes
Muchos hombres pasan por sabios gracias a la ignorancia de los demás.
Anónimo
Los hombres de genio abundan mucho más de lo que se supone. En realidad, para apreciar plenamente la obra de lo que llamamos genio hace falta poseer todo el genio que necesitó para producir la obra.
Edgar Allan Poe
Y atado al corazón que no te olvida, ser un muerto que tiene por morada un cuerpo que no vive sin tu vida.
Elías Nandino
Tu amor fue mi perfume, mi esperanza, la novela de mi alma, mi alegría, cuando tú me decías: mi poeta, me inundabas de luz y de poesía.
Estanislao del Campo
Yo trato de explicar que las cosas, las personas, están compuestas de líneas muy diversas, y que no siempre saben sobre qué línea de sí mismos están, ni por dónde hacer pasar la línea que están trazando; en una palabra, que en las personas hay toda una geografía, con líneas duras, flexibles y de fuga.
Gilles Deleuze
Yo creo que las banderas han traído muchos problemas en este mundo. Y las banderas, en general, han sido motivo de confrontación más que de unión. Por tanto, si de mí dependiera, yo no pondría ninguna. Así de claro. Yo tengo la mía, pero es personal. ¿Que bajo una bandera se ha unido gente? Sí, pero enfrentándose a otros.
Iñaki Azkuna
Fomenta sin cesar falsos amigos.
Juan Bautista Arriaza
Soldados del Quinto, ustedes me reconocen. Si algún hombre quiere disparar sobre su emperador, puede hacerlo ahora.
Marlene Dietrich
El capitalismo exige para su desarrollo la existencia de un exceso de población a la que puede alquilar por bajo precio en el mercado del trabajo.
Max Weber
Las grandes virtudes del pueblo alemán han producido más desastres que todos los vicios que haya podido producir el ocio.
Paul Valéry
Se torea a compás, como se baila y se canta, a compás, pero también como se vive, o ha de vivirse, a compás.
Rafael De Paula
Dejé de creer en Santa Claus cuando mi madre me llevó a verlo en unos grandes almacenes y él me pidió un autógrafo.
Shirley Temple
Quien no amare al prójimo no os ama, Señor mío.
Teresa de Jesús
Así se va a las estrellas.
Virgilio
Además de tratarse de una economía del exceso y los desechos, el consumismo es también, y justamente por esa razón, una economía del engaño. Apuesta a la irracionalidad de los consumidores, y no a sus decisiones bien informadas tomadas en frío; apuesta a despertar la emoción consumista, y no a cultivar la razón.
Zygmunt Bauman