La causa final, como una virgen a Dios consagrada, nada alumbra.
Francis Bacon
¿No es extraño? Los mismos que se ríen de los adivinos se toman en serio a los economistas.
Anónimo
Sólo hay un principio motriz: el deseo.
Aristóteles
No te establezcas en una forma, adáptala y construye la tuya propia, y déjala crecer, sé como el agua. Vacía tu mente, se amorfo, moldeable, como el agua. Si pones agua en una taza se convierte en la taza. Si pones agua en una botella se convierte en la botella. Si la pones en una tetera se convierte en la tetera. El agua puede fluir o puede chocar. Sé agua amigo mío.
Bruce Lee
Comencé a escribir para vivir y ahora escribo para no morir.
Carlos Fuentes
Honraré la Navidad en mi corazón y procuraré conservarla durante todo el año.
Charles Dickens
El fanatismo con el que clasificaba a las personas en dignas e indignas, según si las veía capaces o no de pasión, era una muestra de las exaltadas exigencias de su corazón.
Czeslaw Milosz
Esperando, el nudo se deshace y la fruta madura.
Federico García Lorca
Cuando jugó 45... h5 no podía creer a mis propios ojos.
Garri Kaspárov
Es pensando en ti, por las mañanas, en la cama, como me decido a darme cuerda y a vivir un nuevo día. Del mismo modo que tú luchas por seguir adelante allí, yo debo luchar por seguir adelante aquí.
Haruki Murakami
Es necesario que los pobres vivan mejor, que sean felices, que no tengan para ellos solamente la tarea, en tanto para los demás queda el bienestar, es eso lo que deben hacer los gobiernos.
José Batlle y Ordóñez
Pero justamente porque soy valiente, tendrán aun más ganas de devorarme, para adquirir parte de mi coraje.
Lu Xun
Al leer los periódicos en el hall de los hoteles sospechamos que alguien les ha robado la noticia más interesante.
Ramón Gómez de la Serna
Enterradme y dejad que descanse bajo el vasto y estrellado cielo. Gozoso viví y gozoso muero.
Robert Louis Stevenson
Para delegar responsabilidades en su organización, y hacer que las buenas ideas se desarrollen junto con las responsabilidades, usted debe escuchar lo que sus colaboradores y asociados están tratando de decir.
Sam Walton
Una palabra es suficiente para hacer o deshacer la fortuna de un hombre.
Sófocles